Gran Canaria entra en la carrera de la aviación sin tripulantes y pilotados desde tierra. Tres multinacional han mostrado interés en instalar en la Isla su centro de desarrollo de robótica aérea y baterías eléctricas, así como la base de pruebas de prototipos de drones de grande dimensiones. El principal interesado es el gigante chino Ehang, que ya ha anunciado que comenzará a operar en Dubai este verano con aerotaxis sin pilotos del tamaño de avionetas; a la que se ha unido la alemana Lilium, que dispone de drones con capacidad para cinco pasajeros; y en los últimos días se ha abierto la puerta a la australiana Airspeeder, la promotora de los fórmula 1 de los coches voladores eléctricos. El consejero delegado de Singular Aircraft en Canarias, José Luis García, espera los permisos del ministerio de Fomento para dar vía libre a la «aviación del futuro», y poner en marcha la base logística para atraer a esas compañías, que incluiría una pista de despegue (horizontal y vertical) para las pruebas en el aire. La principal opción es el aeródromo privado de El Berriel, en San Bartolomé, aunque también han estudiado emplazamientos alternativos en Gáldar y en otros municipios. La inversión en infraestructura básica con los hangares ronda los 64 millones y dará empleo inicial a 200 personas. El proyecto cuenta con apoyo institucional, universitario y del empresariado canario.
Parece ciencia ficción, pero lo que era una ocurrencia de las películas futuristas se puede convertir en una realidad en poco tiempo. El gigante chino Ehang pretende levantar en Gran Canaria una base operativa donde someter sus drones de última tecnología a las pruebas previas antes de sacarlos al mercado. Es decir, que vuelen con seguridad sin un piloto en la cabina, sino controlados a miles de kilómetros de distancia vía satélite, como si fuera un videojuego, trasladando mercancías o pasajeros. Estos aparatos no son solo ya unos pequeños drones, sino que se asemejan a las avionetas. Para hacernos una idea, el modelo tiene unas dimensiones de 14 metros entre las puntas de alas y 11,5 metros de longitud. Y, lo más importante, hasta 5.000 kilómetros de autonomía.
La ciudad de Dubai ha anunciado ya la puesta en marcha de un servicio de taxis voladores en julio, utilizando el dron de Ehang. Este es solo el principio de un sistema de comunicaciones que se espera se expanda a una gran velocidad por el mundo.
La multinacional china es la primera y única empresa de este sector que cotiza en el segundo mayor mercado bursátil de Estados Unidos (Nasdaq). Y el fabricante ha mostrado un especial interés en aprovechar las condiciones especiales de Canarias, y llegaría de la mano de Singular Aircraft. El consejero delegado en Canarias, José Luis García, un experto que ha pasado más de tres décadas fuera de las islas y que quiere desarrollar sus conocimientos y experiencia en este campo en su tierra, señala que «este es un mercado nuevo, que está empezando, y en el que podemos estar en primera línea, porque tenemos todas las condiciones para ello».
El empresario está convencido de que las Islas se pondrán en la vanguardia de un sistema aéreo de comunicaciones, que ya empieza a romper los esquemas del transporte. No en vano, estos drones puede convertirse en servicios de taxis para el suministro a buques y de mercancías («podríamos ser la falúa del futuro»), colaborar en incendios, en trabajos agrícolas, vigilancia, seguridad y hasta en el reparto del correo. Incluso, «tenemos el aparato perfecto para localizar pateras, pero de momento no tenemos permisos, quizás con el apoyo de ONGs lo podemos conseguir», en alusión a la inmigración. En ese sentido, apunta que Kenia ya tiene pedidos para el reparto aéreo de vacunas.
«Canarias tiene todos los papeles para ser este laboratorio de pruebas de la aviación del futuro. Y no podemos perder tiempo, porque todo avanza a una gran velocidad. Zaragoza acaba de aprobar una zona para vuelos verticales. Estamos hablando de un proyecto mucho más ambicioso, que atraería a técnicos y mucho personal cualificado para quedarse temporadas durante las pruebas, lo que supondría beneficiar a los hoteleros y a otros muchos negocios con su estancia. Esto es un ejemplo de diversificación económica».
Las ventajas de Canarias sobre otros competidores son diversas. Entre ellas, el tiempo, que permite sacar a volar en una zona segura del mar los aparatos casi todo el año, frente a otros países con peores condiciones climáticas. «Cuando nieva en Europa aquí se puede seguir probando». En segundo lugar, el tener la más baja fiscalidad europea para las empresas, gracias a la Zona Especial Canaria (ZEC). A eso se suma que las pista de maniobras pueden estar junto al mar, lo que garantiza mayor seguridad para la población. Estos aparatos, además, se posan en el agua si tienen algún problema. La posición geoestratégica del Archipiélago, junto a África y en zona de tránsito con América. También ayuda la presencia del Centro Espacial de Canarias (INTA), en Maspalomas. Y la cualificación de los universitarios canarios, porque estamos hablando del desarrollo de la robótica aérea, de probar piezas de nuevas tecnología e innovación permanente en un campo por explorar. «Evitaríamos la fuga de talentos».
Canarias sería lo que el experto denomina un ‘sunbox’. Esto aunar todo el operativo en un único espacio de trabajo (pruebas aéreas y de equipos, innovación e investigación). «No existe nada igual, con todo lo que podemos ofrecer en las Islas seríamos únicos en el mundo». Además, serviría para avanzar en el campo de las baterías eléctricas, que es el nuevo combustible.
La empresa china también estaría, según el promotor, interesada en implantar servicios de taxis aéreos en las Islas, con modelos eléctricos que solo generan el ruido de las hélices, y de media hora de autonomía. Los grandes aparatos tienen unas 20 horas de autonomía y recorren distancias de hasta 5.000 kilómetros. Ehang dice que su modelo ‘Flyox I «es el dron civil más grande, versátil y económico del mercado».
Singular Aircraft está en contacto también con la alemana Lilium, que ha desarrollado un prototipo de cinco plazas para servicios de taxi aéreo y de transporte compartido. La empresa española Ferrovial, ya anunciaba este año un acuerdo con esta compañía desarrolladora de un avión eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL), para implantar una amplia red de vertipuertos (de despegue vertical) en Estados Unidos.
Y también se ha sumado hace poco Airspeeder, que apuesta por los drones eléctricos sin piloto para disputar competiciones similares a la Fórmula 1, pero en el aire.
Los promotores han presentado al ministerio de Fomento la solicitud de los permisos para poder operar con vuelos no tripulados, ya que es una actividad nueva que requiere una regulación. Y el empresario espera que la burocracia no retrase una iniciativa, que cumple con todos los retos europeos de diversificación económica, antes de que las multinacionales opten por otros destinos.
De forma paralela, han tenido ya un encuentro con el presidente canario, Ángel Víctor Torres, que ha mostrado su apoyo para darle un ámbito regional y que sirva de elemento ‘tractor’ para la nueva economía. «La sociedad pública Proexca ha creído en el proyecto, y tiene un estudio para su desarrollo, al igual que nos apoya Femepa, la Zona Especial Canaria ZEC), el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, la universidad y muchas personas». José Luis García, recalca que la tecnología espacial ofrece «un potencial tremendo para Canarias».
Singular Aircraft trabaja en el emplazamientos para la base logística y la pista de pruebas. El lugar «ideal» es el aeródromo privado de Tarajalillo, porque es una infraestructura hecha, con posibilidad de crecimiento, oferta hotelera y la cercanía al centro espacial. Sin embargo, también han localizado terrenos en Sardina de Gáldar que permiten una pista de 1.400 metros para el aterrizaje y despegue de los prototipos de drones a testear (horizontal, porque vertical apenas requiere un espacio de 10x10 metros), con opciones de expansión. En ese sentido, señala que Proexca tiene un estudio de posibles emplazamientos.
La matriz Singular Aircraft trasladaría a Canaria todo su operativo en Cataluña. Y estima que la inversión inicial será de 65 millones de euros, dando empleo a unas 200 personas. Necesitarían 3.000 metros cuadrados en hangares de inicio, y disponibilidad para llegar a 7.000 metros. «Todo eso para que las empresas tengan un mínimo ecosistema para invertir».
