El despliegue policial en el que participaron unos 7.000 efectivos de la Policía Nacional, Guardia Civil, policías locales y autonómicas, evitaron que en el primer viernes sin toque de queda tras decaer el estado de alarma se formasen botellones y aglomeraciones en la Isla. Aunque trascendió un vídeo en el Sur de Gran Canaria en el que unas personas participaban en una fiesta en un barco que fue denunciada por la Benemérita, en Las Palmas de Gran Canaria, por su parte, se disolvieron siete botellones.
Entre las personas que se saltaron las normas sanitarias están las que participaron en una fiesta en un barco al que la Guardia Civil del Puesto Principal de Puerto Rico-Mogán, en coordinación con el Servicio Marítimo Provincial de la Guardia Civil procederá a denunciar en base al análisis de las imágenes difundidas en una red social donde se observa la celebración en una embarcación profesional. En base a los principios de colaboración ciudadana y el seguimiento que se realiza en redes sociales, la Guardia Civil tuvo conocimiento de la celebración de un evento en un barco profesional con puerto base en Puerto Rico. Dicha embarcación se encontraba en el litoral del municipio de Mogán, entre las playas Tauro y de Mogán, y en la misma se observaba una pluralidad de personas que no guardaban ni observaban las medidas sanitarias decretadas por el Gobierno de Canarias.
La Policía Local de la capital disolvió siete reuniones de jóvenes e impuso 49 multas el sábado
Por ello la Guardia Civil está realizando las comprobaciones oportunas para identificar y denunciar mediante el folio la propia embarcación al responsable ya que se trata de un catamarán dedicado a la actividad comercial y con base en el Puerto de Puerto Rico. Estos datos forman parte de la anotación expresa relativa a la responsabilidad de respetar y cumplir las medidas sanitarias según el protocolo “COVID 19” en un evento en unión a los datos personas de los asistentes a dicho evento.
En el resto de municipios de la Isla no hubo actuaciones relacionadas con incumplimiento de medidas sanitarias en lo que ha sido el primer viernes sin toque de queda desde que comenzó el estado de alarma que finalmente decayó el pasado 9 de mayo tras más de un año con restricciones por la pandemia. En la capital grancanaria se disolvieron siete botellones durante el dispositivo que puso la Policía Local, en coordinación con la Policía Nacional, para controlar el ocio nocturno en la capital, centrado en la vigilancia de botellones y fiestas ilegales, durante el primer fin de semana sin estado de alarma.
Todo esto con el objetivo de prevenir la celebración de botellones y fiestas ilegales así como el incumplimiento de las medidas sanitarias, Las Palmas de Gran Canaria ha contado con un refuerzo especial de efectivos, vigilancia con drones y control sobre más de 70 puntos de botellón en distintos puntos del municipio.
En Fuerteventura y Lanzarote no se registraron, al cierre de esta edición, actuaciones relacionadas con fiestas, botellones y aglomeraciones en las que se saltaran las medidas sanitarias.
Mientras que en Santa Cruz de Tenerife la Policía Local disolvió anteayer siete botellones con sus respectivas sanciones y tramitó 49 propuestas de sanción por no hacer uso de la mascarilla. Asimismo, a través del dispositivo, se detuvo a un individuo por tráfico de cocaína. El personal de refuerzo de la Unidad Operativa y de Unipol de la Policía de Santa Cruz de Tenerife atendió en el primer viernes sin toque de queda múltiples llamadas de vecinos por fiestas en domicilios que fueron solventadas sin mayor problema, así lo informó Europa Press.
Además, la Policía Local informó ayer en su cuenta oficial de Twitter que en el seguimiento del ‘botellón’ lo más significativo ha ocurrido en el camino del Hierro, donde los agentes intervinientes levantaron varias actas y disolvieron la reunión de los allí presentes. Asimismo, en un dispositivo conjunto con la Policía Nacional y la Policía Autonómica se intervino en la zona del Parque Marítimo, donde además de tratar de impedir ‘botellones’, se actuó con la Subunidad Canina K9, levantándose varias actas por drogas.
El dispositivo de 7.000 agentes que vigilan de forma coordinada continua hoy en las distintas Islas con el fin de evitar que se produzcan aglomeraciones y velar porque se cumplan las normas para la prevención de la pandemia de covid-19.
En este sentido, la Guardia Civil destacó que durante el verano los controles para el cumplimiento de las medidas sanitarias y de seguridad ciudadana serán reforzados, haciéndose extensivos también en el litoral y su mar territorial, y no solo a las embarcaciones de explotación turística, sino a todas las embarcaciones de recreo. Por ello, desde la Guardia Civil se reitera a la población, en orden al respeto y al derecho de todos a disfrutar de los espacios públicos en plenas garantías, el observar el comportamiento cívico y responsable a todas las personas que acudan a las playas y hagan uso de una u otra forma del litoral.
Asimismo, desde la Benemérita se recuerda que este tipo de imprudencias y acciones dolosas generan un riesgo para el que las comete así como el resto de la población por ello se apela a la ciudadanía al civismo ya que frenar la propagación de esta pandemia es responsabilidad de todos.
