Coalición Canaria-Unidos por Gran Canaria en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria exige ayudas directas para los ganaderos de la capital grancanaria que ven gravemente amenazada su actividad y que se enfrentan al cierre de sus explotaciones. La capital es el municipio de la isla con mayor número de cabezas de vacuno censadas, aproximadamente 6.000.

El exconsejero y diputado Narvay Quintero se ha comprometido a elevar al Parlamento de Canarias una Proposición No de Ley a través de la cual se recojan las demandas de «un sector que agoniza». Aseguró Quintero que «la situación de la que partían antes de la pandemia era muy complicada ya que la renta de los productores es muy baja porque la diferencia entre lo que cobran los ganaderos y el precio de venta al consumidor es alta». El portavoz de la formación en Las Palmas de Gran Canaria, Francis Candil, reunió a una representación de los ganaderos de la capital para abordar la situación. El sector alerta de que de no tomarse medidas en el corto plazo se verán obligados al cierre de las explotaciones.

Pablo Rodríguez

En el encuentro participaron también el secretario general de los nacionalistas en la isla, Pablo Rodríguez, el diputado de CC-PNC-AHI y exconsejero de Agricultura, Narvay Quintero, el viceportavoz en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, David Suarez, y María Fernández, vicesecretaria insular de Políticas Sectoriales.

Los nacionalistas se han comprometido a hacer suyas las demandas del sector, el cual solicita ayudas directas por explotación para ser financiadas a través de los fondos europeos y del Estado para paliar los efectos del Covid. El objetivo es mitigar los daños sufridos durante la pandemia.

Los ganaderos alertan de que la situación les aboca al cierre de la actividad y reivindican la sobredimensión económica y las pérdidas que ha supuesto mantener el producto sin que este pueda ser comercializado, ya que los canales de venta han disminuido como consecuencia del cierre de muchos de ellos, a lo que se le ha sumado la subida exponencial del precio de la alimentación del ganado que en algunos casos, como el cereal, llega a un 40%.

Por su parte, Candil expuso la necesidad de que exista un plan específico para la recuperación de la actividad agrícola y ganadera en la capital. «Somos el municipio con más cabezas de vacuno de toda la isla con cerca de 6.000 animales, invertir en el sector es una apuesta clara por impulsar nuestra soberanía alimentaria».