El Cabildo de Gran Canaria ha iniciado una evaluación de la eficiencia energética de sus inmuebles y ayer presentó los resultados de los estudios realizados en la Casa Palacio, la sede del Patronato de Turismo en Triana y el edificio adquirido en la calle Buenos Aires para acoger las oficinas del Instituto de Risco Caído y la Reserva de la Biosfera. El presidente Antonio Morales, junto a los consejeros de Empleo, Juan Díaz, y de Arquitectura y Vivienda, Conchi Monzón, explicaron que el trabajo ha sido cofinanciado por el Servicio Canario de Empleo y el Estado, con los tres equipos formados por jóvenes arquitectos e ingenieros que durante seis meses han realizado un análisis constructivo e histórico «que permitirá realizar las adaptaciones necesarias en estos tres edificios para afrontar la tarea de reducir las emisiones de CO2, cuyo primer paso ha sido la elaboración de los proyectos con las medidas correctoras para incrementar la eficiencia energética de los inmuebles».

La suma de las emisiones de los tres edificios alcanza los 200 kilos de carbono por metro cuadrado al año, si bien el del Patronato produce el 65% de todas esas emisiones. Cuando se apliquen las medidas propuestas por el estudio, el edificio de Casa Palacio podría ahorrar hasta un 76,8% de energía; la sede del Patronato de Turismo en un 60%; y la del Instituto de Risco Caído, un 63,3%, lo que también reduciría considerablemente las toneladas de CO2 emitidas a las atmósfera. En el caso del edificio de turismo, el que más emisiones contaminantes genera, se pasaría de los 134,71 kg de CO2 por metro cuadrado al año a poco menos de 54 kg.

El Cabildo cuenta con un amplio inventario de edificios susceptibles de ser intervenidos y de esta manera contribuir en este objetivo común que es la Transición Ecológica, por lo que este proyecto constituye el primer paso de un plan de actuación necesario, a desarrollar para mejorar el rendimiento y el mantenimiento.