El Ayuntamiento de Valleseco ha hecho una modificación del presupuesto de este año para disponer de un suplemento de crédito de 1,5 millones de euros para destinarlo a la adquisición de varios bienes inmuebles. Entre las propiedades que se van a adquirir figuran la casona de la familia Rodríguez, ubicada frente a las casas consistoriales, que albergó hasta 1974, en su planta alta, la sede de la corporación; una finca en Crespo; el molino de Cayetano Pérez, en el barrio de Lanzarote; otra casa más con terreno, la de Pepe León, así como otra parcela en El Barranquillo, también en Lanzarote.
La suspensión de la regla del gasto, aprobada por el Ejecutivo central en febrero del pasado año, la ha aprovechado el gobierno municipal, que lidera Dámaso Arencibia (PP), para disponer del superávit del pasado ejercicio y hacerse con este patrimonio. Así de los 3,8 millones que arrojó de saldo positivo el balance de 2020 se va a disponer de esa partida de 1,5 millones para estas compras, propuesta que fue respaldadas de forma unánime por el Pleno, aunque el PSOE, único partido de la oposición votó en contra del presupuesto municipal de este año.
Las cuentas de este ejercicio suponen una inversión de 5,8 millones a las que ahora se suma esta partida a cuenta del saldo del pasado año. El 90 por ciento de este dinero se gastará en afrontar las compras de casas y fincas, mientras que el 10% restante será para la redacción de los proyectos sobre el uso futuro de los diversos inmuebles.
“Vamos a adquirir estos bienes inmuebles como las casonas y también terrenos para disponer de más infraestructuras y servicios con los que atender las demandas de los vecinos del municipio”, señaló ayer el alcalde. Arencibia aseguró que en muchos casos ya existen negociaciones muy avanzadas con los propietarios o herederos que tienen intención de llegar a acuerdos, y es por eso, que se decidió disponer de este suplemento de crédito.
En el caso de la casona, que albergó la sede del Ayuntamiento, se trata de una vivienda de dos plantas, en la que la residía en la primera planta la familia Rodríguez mientras que en la superior, en régimen de alquiler, estaban las casas consistoriales de los inicios de la democracia. La vivienda, de estilo canario, cuenta con patio, y hasta un terreno de 700 metros cuadrados. Parece que por parte de los herederos ya hay disposición de llegar a un acuerdo con el ayuntamiento y la cifra de la operación se eleva a los 450.000 euros. El inmueble se destinaría, una vez adquirido, a albergar la sede del centro de interpretación del bosque de laurisilva.
En el caso de la compra de la finca de Crespo, y que tiene una superficie de unos 1.000 metros cuadrados, según explicó el alcalde, tiene mucho interés estratégico para el municipio porque cuenta con participaciones de aguas en las galerías que se encuentran en esta parte alta del municipio, no en vano son muy conocidas las galerías de Crespo.
Otra de las adquisiciones que va a llevar a cabo el Ayuntamiento es el molino de Cayetano Pérez, en Lanzarote, que supone un desembolso de 60.000 euros, y el objetivo es restaurarlo para que pueda ser visitado.
También está prevista la compra de otra casona, propiedad de Pepe León, por la que se desembolsarían unos 350.000 euros y cuyo destino seria convertirlo en un piso tutelado para el alojamiento de las personas con discapacidad del centro ocupacional de este municipio.
El listado de las compras incluye, por último, otra parcela en la zona de El Barranquillo, en Lanzarote, que tiene una extensión de más de 1.000 metros cuadrados con la que se pretende resolver los problemas de aparcamiento en este barrio de Valleseco.
De otro lado, el Pleno ratificó la baja del edil y portavoz del PSOE, Paulino Javier Rodríguez Guerra, segundo miembro de este partido que abandona tras Norberto Pérez, que lo hizo en 2019. La nueva edila que debe incorporarse es Ana Arencibia Viera, que es prima del alcalde.
De las tres mociones que presentó el PSOE todas fueron rechazadas. En el casod e la rebaja del tipo del IBI del 0,5% al 0,4% la mayoría del PP la rechazó argumentando que hay que esperar por la ponencia de valores de las viviendas. En cuanto al bono social para pagar el IBI el grupo de gobierno basó su voto en contra en el hecho de que no se puede crea un bono para afrontar un impuesto. Y respecto a la de la rebaja de la tasa de guarderías los populares defendieron que ese ingreso está ya contemplado en el presupuesto.
