Fernando Egea Dos Santos, hijo del histórico líder republicano Fernando Egea Ramírez, quien fue fusilado por el bando nacional el 5 de agosto de 1936; ha fallecido a los 85 años de edad en Estados Unidos, donde vivía después de exiliarse a México junto a su madre Herminia Dos Santos.

Precisamente la muerte de la mujer del que fuera delegado gobernativo del norte de Gran Canaria durante la II República hizo que Fernando Egea Dos Santos visitara el cementerio de Vegueta en septiembre de 2009 para depositar las cenizas de su progenitora junto a las de su padre, quien fuera además farmacéutico en Agaete.

No obstante, el grupo socialista del municipio del noroeste de Gran Canaria lleva el nombre de Fernando Egea, una persona muy recordada entre los vecinos. El PSOE, incluso, quiso que tanto el socialista como su mujer fueran nombrados hijos adoptivos en 2010, pero el gobierno local, liderado entonces por el PP, rechazó esta iniciativa.

Fernando Egea Ramírez, nacido en Málaga, fue fusilado cuando tenía 28 años y su esposa, de 21 años y natural de Santa María de Guía, estaba en estado en esas fechas. Eduardo Suárez, un comunista de La Isleta que era líder de la clase obrera canaria, y Fernando Egea fueron los encargados de organizar la resistencia contra el golpe en el Norte. 

Cuando las fuerzas militares rebeldes controlaron la zona Eduardo Suárez Morales, Pedro Delgado Quesada (concejal y consejero del Cabildo), Fernando Egea y su esposa, Herminia dos Santos, huyeron por el puerto de las Nieves de Agaete. Poco después el barquero simuló falta de combustible y los dejó en la costa de San Nicolás. 

Se escondieron en una cueva del barranco del Asno, donde los detuvieron el 24 de julio tropas del patrullero Arcila. Fueron procesados por rebelión. El tribunal impuso pena de muerte a Eduardo Suárez y Fernando Egea y a Pedro Delgado y Herminia Dos Santos los condenó a 26 años y 8 meses de cárcel.

Su mujer pudo huir y exiliarse en México junto a su hijo Fernando Egea Dos Santos, quien estudió Medicina en la Universidad de Cuyo, en la ciudad argentina de Mendoza, y se especializó en la de Chile. También cursó estudios en Temble University de Philadelphia. Trabajó como neurólogo durante más de 40 años y fue profesor en la Universidad de Kansas City, donde fijó su residencia.