Una decena de vertederos incontrolados se han multiplicado recientemente junto a un camino, de tierra al principio y después de gravilla, en la zona agrícola ingeniense de Los Moriscos, rodeado de vertederos en activo y otros abandonados, a un kilómetro de un cruce de la carretera entre Las Majoreras y Ojos de Garza (Telde) y a poco más de 1,5 kilómetros del aeropuerto de Gran Canaria.
Entre el primero, el más cercano a la carretera general, y el último hay una distancia aproximada de unos doscientos metros, y están todos ellos pegados al camino llamado Yegua, haciendo fácil la descarga, salvo el más alejado y pequeño que está a menos de cincuenta metros del camino. Todos los vertederos se hallan separados, alrededor de unos veinte o cincuenta metros entre sí, al tiempo que están unidos por el camino.
Todo este lugar se encuentra cercana al barranco de los Millos y no lejos de la zona industrial de Las Majoreras, que está al sur. No hay viviendas alrededor, es un lugar muy poco transitado y es fácil pasar desapercibido.
Los dos primeros vertederos, según se viene de la carretera, están en una curva, a un lateral de un invernadero alto de plataneras y uno de ellos encima de la base circular de piedra de lo que fue un estanque, y junto a otro. Estas dos infraestructuras estaban en la parte alta de lo que había sido la finca experimental de la Caja Insular de Ahorros, vacía y desmantelada en la actualidad, y que fue puntera en su tiempo cuando funcionaba.
Algunos de estos vertederos parecen temáticos, porque predomina un artículo, como el escombro, mientras otros son variados. En estas montañas de basura se puede encontrar de todo: el chasis de un coche, sacos de escombros, neumáticos, sofás y sillas, la cisterna de un baño, tablas de muebles, mucha madera, palos, palés, puertas, hierros, cristales y la bicicleta de tres ruedas de un niño, entre otros.
Respuesta
La alcaldesa de Ingenio, Ana Hernández, lamentó ayer la existencia de los vertederos de Los Moriscos, al saber de ello a través de LA PROVINCIA / DLP.
«Por supuesto que actuaremos mañana mismo [hoy, para el lector], aunque primero tenemos que averiguar si se trata de un camino y de un terreno público o privado, y en función de que sea uno u otro, se actuará de distinta manera y en consecuencia», explicó Ana Hernández.
La regidora dejó claro que la responsabilidad es de quien abandona esos escombros y todo lo demás, así «como del que sea propietario» de ese camino y de esos terrenos, en el caso de que sean privados. «Si es privado, donde nosotros no podemos actuar, sólo en suelo público, requeriríamos al dueño que retirase y limpiase todo eso. El Ayuntamiento no tiene el número imposible de agentes de la Policía Local para vigilar cada rincón que pudiera ser elegido para echar vertidos en este municipio, que va desde la costa hasta la cumbre», apuntó.
Desde la Corporación local ya se planeó ayer que técnicos municipales y funcionarios harían durante la jornada de hoy las gestiones para conocer la titularidad de ese espacio, como también a primera hora una inspección para conocer al detalle dichos vertederos. Según su agenda y compromisos para la jornada de este jueves, también puede que se traslade al lugar Carmelo Padrón, edil de Vías Obras, Servicios Públicos, Medio Ambiente y Parque Móvil.
Fuentes municipales señalaron que «habría que poner una solución, como una valla o una cadena que corte el paso al tráfico rodado, y con la llave del candado para el propietario».
