Juan Trujillo Sarmiento, que era natural de Tejeda y que residía en Las Palmas de Gran Canaria desde finales de los años 60 del siglo pasado, falleció ayer a los 90 años de edad en la capital grancanaria.

«Una buena persona; un trabajador; una persona que siempre gastaba una broma y lo acompañaba con una sonrisa; estaba pendiente de lo que necesitases». Así definieron y comentaron anoche familiares y amigos sobre este vecino de El Batán.

«Era un luchador que quería sacar a su familia adelante», agregaron sobre Juan Trujillo, quien era viudo desde hace 33 años, ya que su esposa, Maruca Rodríguez Rodríguez, murió en 1988. Esta pareja tuvo cuatro hijos: Agustín, llamado Suso; Gloria, Juan y María del Rosario, llamada y conocida como Chari Trujillo Rodríguez.

Maruca y Juan eran los dos naturales de Tejeda, donde se habían conocido. Antes de abandonar la Cumbre para buscar un futuro mejor, Juan Trujillo había trabajado en la agricultura y ganadería. Ya en la capital, comenzó a trabajar en el sector de la construcción, para finalmente hacerlo durante más de veinte años hasta jubilarse como camionero de reparto de Pepsi.

Aunque hiciera su vida con su familia en Las Palmas de Gran Canaria, nunca olvidaba su pueblo cumbrero natal, ni a su familia. Todos los fines de semana y si nada lo impedía, subía a Tejeda, y ayudaba a sus hermanos y familiares, como por ejemplo a la hora de participar cuando había que plantar o recoger papas. Juan Trujillo era el mayor de siete hermanos: Francisco, llamado Paco; Miguel, Rosa, Benita, Socorro y María Jesús, pero llamada y conocida como Chuche Trujillo Sarmiento.

Los restos mortales de Juan Trujillo Sarmiento serán enterrados hoy viernes en el cementerio de San Lázaro, tras el traslado a partir de las 15.30 horas del tanatorio de San Miguel de Las Palmas de Gran Canaria, donde fueron velados.