Edmundo Domínguez del Río Sánchez, Medalla de Oro de la Ciudad de Gáldar, recibió un entrañable homenaje en el Teatro Consistorial de Gáldar, en reconocimiento a su larga labor como director de la Coral Polifónica de Gáldar durante 38 años.
Fue un acto en el que se quiso reconocer, tras su jubilación, la extensa trayectoria al frente de la Coral Polifónica y a pesar de contar con aforo reducido debido al protocolo Covid, no faltaron ni sus antiguos alumnos, compañeros y profesores de música y representación del Ayuntamiento de Gáldar, a través del concejal de Cultura y Fiestas, Julio Mateo.
Inmaculada Mendoza, profesora de piano y clarinete y exalumna, detalló a los asistentes el extenso currículum de Edmundo Domínguez, definiéndolo como una persona innovadora, emprendedora, colaborativa, cuyo trabajo ha trascendido más allá de su propia persona.
La intervención más emotiva por la huella que ha dejado Edmundo Domínguez del Río y Sánchez fue la de las ex-alumnas de canto que lograron emocionarlo. «Edmundo, al llegar a clase, nos contagiaba su completo amor por su profesión. Todos los que cruzábamos la puerta de ese aula de ensayo sabíamos que nos esperaba una persona con una sonrisa enorme», aseguraron.
El homenajeado cerró las intervenciones hablando por un lado de la importancia del Canto Coral en la música y, una segunda parte, para los agradecimientos. «La música está en la voz, y aunque instrumento y voz forman un binomio fundamental, para tocar bien hay que cantar bien», sentenció.
