El risco de Faneque ya tiene perforados los dos túneles que permitirrán evitar uno de los tramos más peligrosos de la actual carretera de La Aldea. Los operarios de la UTE, formada por las empresas Ferrovial-Agromán-Acciona Construcción-Lopesan y Bitumex, adjudicataria de los trabajos de la segunda fase de esta vía, completaron este viernes el calado de los dos túneles más largos, con más de 2.100 metros por cada tubo, de los ocho proyectados en el tramo que unirá Agaete con El Risco.
Con esta maniobra, se sigue avanzando en una obra trascendental para las comunicaciones del noroeste de Gran Canaria puesto que ya se han calado tres de los ocho túneles previstos en esta fase, según señalan desde la Consejería de Obras Públicas, Transportes y Vivienda del Gobierno de Canarias, que dirige Sebastián Franquis.
El calado que acaba de culminar permitirá agilizar los trabajos de acondicionamiento y finalización de la doble galería que atraviesa el macizo de Faneque con el objetivo de poner en servicio y abrir al tráfico este paso subterráneo durante el primer semestre de 2022, que es el plazo que ha fijado este departamento del Gobierno canario.
Desde Foro Aldeano, colectivo que ha defendido históricamente la construcción de vía, su presidente Rafael Ramos, se mostraba este viernes confiado en que «ahora la UE y la Consejería se pongan las pilas para que este acceso pueda estar operativo lo más pronto posible». Ramor recordaba que hace apenas quince días un desprendimiento de piedras hizo que la vía estuviera tres días cerrada al tráfico. Asimismo, aprovechaba para reclamar la misma celeridad en el trazado del viaducto del Risco cuyo proyecto inicial se modificó.
Desprendimientos
Con estos túneles de Faneque se ha buscado precisamente evitar el tramo más peligroso de la actual GC-200, una vía que rodea el macizo y que sufre con mucha frecuencia desprendimientos de tierra y piedras, lo que obliga a cerrar la carretera de La Aldea, y deja a sus habitantes incomunicados por el norte, con la única opción de llegar a Mogán para desplazarse después hacia al resto de la isla.
Los dos tubos de Faneque, denominados en la obra como túnel 4, tienen una longitud de 2.020 metros el del lado mar (que se caló hace 20 días) y acogerá la vía que en el futuro tendrá sentido Agaete-La Aldea, y 2.100 metros el del lado tierra, que se caló ayer, y albergará en el futuro la vía con sentido La Aldea-Agaete.
Como ha ocurrido en todos los calados anteriores, comienza ahora una fase de excavación en mina en esta boca del túnel de Faneque que se prolongará varios días y que conllevará trabajos de sostenimiento del terreno a base de gunitado, es decir, la proyección de hormigón sobre las paredes de roca para conseguir una superficie uniforme y resistente sobre la que poder operar posteriormente. Finalizadas estas tareas de perforación , ahora los operarios con la ayuda de maquinaria empezarán a ampliar toda la excavación del suelo del túnel hasta alcanzar los 8 metros de alto, que es la altura que tendrá definitivamente cuando entre en servicio.
Actualmente la UTE mantiene en esta obra un despliegue de trabajadores y maquinaria que trabaja las 24 horas del día en diferentes turnos y que en estos momentos se encuentran realizando, en su mayoría, tareas de perforación en los túneles 6 y 9.
Al calado de las dos bocas del túnel de Faneque le han precedido el túnel 3, llamado de Guguillo con 604 metros, que fue el primero que se caló en mayo de este mismo año; la galería del lado mar de faneque hace 20 días; y el 7, junto al barranco de Guayedra que se terminó de calar hace 10 días. Para perforar estos túneles la UTE está empleando voladuras con un novedoso explosivo a base de emulsión y medios mecánicos.
Las obras de esta segunda fase de la carretera de La Aldea se adjudicaron con un presupuesto de 152.361.708 euros y un plazo de ejecución de 65 meses. El nuevo tramo que sustituirá a la actual GC-200 tiene un trazado de 8,5 kilómetros, una nueva vía rápida con velocidad específica de 80 kilómetros por hora y que será una sucesión de túneles y viaductos hasta llegar a conectar con la primera fase de la carretera, el tramo El Risco-La Aldea, que se abrió en 2017.
Precisamente debido a la accidentada orografía de esta zona de la isla, la obra de ingeniería ha sido muy compleja ya que ha obliado a trazar ocho túneles, dos viaductos y tres enlaces. La necesidad de estos túneles hace que el 70% del recorrido de este nuevo tramo de la carretera de La Aldea sea subterráneo, minimizando por tanto el impacto medioambiental en el entorno que atraviesa.
