Un barranco vivo. Valsequillo quiere convertir todo el espacio natural que recorre el barranco de San Miguel, unos ocho kilómetros que van desde Tenteniguada hasta el barrio de Tecén, en un parque temático educativo natural. El recorrido que ya forma parte de un sendero se transformará así en una zona de recreo y esparcimiento y para ello se va a mejorar el estado de los caminos, se van a restaurar los bancales, recuperar algunas construcciones y acondicionar áreas de descanso. Esta es una de las actuaciones más destacadas del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino de Valsequilllo 'Naturaleza en flor' que acaba de obtener una financiación de 2 millones de euros del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
Empeñado en conservar y fortalecer su tradición agrícola y ganadera, este municipio de las medianías de Gran Canaria lleva años apostando por diversificar la economía a través del turismo ligado a la naturaleza, el paisaje y el sector primario, un reto ya definido en el Plan Estratégico de Desarrollo Sostenible e Integral (Pedsi), aprobado por el Ayuntamiento, cuyas acciones buscan poner en valor el patrimonio natural, cultural, y gastronómico, y que han logrado además llamar la atención en Madrid. De los 56 proyectos de Sostenibilidad Turística que presenta Canarias para acceder a los fondos de recuperación Next Generation EU son solo ocho los que resultan seleccionados, y uno de ellos es el de Valsequillo.
Visita autoguiada
Otra de las cosas que se va a hacer en el barranco de San Miguel para que los visitantes lo puedan recorrer de forma autoguiada es colocar paneles explicativos con códigos QR. A través del móvil los turistas podrán descubrir los elementos patrimoniales que conforman este paraje como son las acequias, los estanques; los etnográficos como las viviendas tradicionales, los alpendres, los molinos de agua; la riqueza botánica entre la que se encuentran especies tan singulares como los eucaliptos rojos de Tecén, así la fauna; y los yacimientos arqueológicos; las fincas y explotaciones ganaderas; y en definitiva conocer la historia de este pueblo a través de todo ese cauce.
Precisamente la ruta del agua va a ser uno de los productos turísticos sobre los que va pivotar la oferta del destino Valsequillo. El municipio que posee unas de las cuencas hidrográficas más importantes de la isla con sistemas de conducción del agua desde los primeros pobladores quiere aprovechar estas infraestructuras para que los turistas puedan conocer como se las han ingeniado sus pobladores para extraer, almacenar y distribuir este preciado bien. El objetivo es hacer un inventario de estos recursos, rehabilitarlos, y señalizarlos a fin de fomentar las vistas turísticas y educativas a las presas, a los estanques, pozos, acequias y cantoneras.
Y en esta apuesta por el sector primario las fresas tienen también su propia ruta. Se trata primero de fomentar el consumo de este producto que pese a su gran calidad tiene que competir con las que llegan de otros lugares. Para ello se ha previsto llevar a cabo campaña de concienciación entre los consumidores, y también buscar la forma para que el producto se pueda exportar a otros mercados. De la misma forma se considera fundamental que los agricultores freseros puedan abrir sus explotaciones a los visitantes y que se potencie la feria de esta fruta.
Al mismo tiempo, según explica el alcalde de Valsequillo, Francisco Atta, otras de las actuaciones que se contemplan es habilitar en el casco histórico un centro de información e interpretación turístico a donde puedan acudir los visitantes para informarse de los lugares de interés. Para ubicar estas instalaciones el grupo de gobierno baraja adquirir un inmueble en el mismo casco del municipio. Además de dar detalles de los sitios que visitar y las rutas que recorrer, el centro servirá para promocionar los productos gastronómicos y artesanales.
Asimismo se va aprovechar para la visión panorámica que hay desde la calle Sol, en el mismo centro histórico para instalar un mirador ya que se puede contemplar toda la Caldera de Tenteniguada, el barranco de San Miguel, y el conjunto arquitectónico de interés histórico del cuartel del Colmenar que se localiza en este barranco, y que el Ayuntamiento pretende adquirir. En este sentido, el alcalde destaca que el Ayuntamiento ya dispone de una partida de un millón de euros para comprar el citado destacamento a los herederos de la familia de Benito Pérez Galdós.
El mirador se construirá sobre una plataforma acristalada que sobrevolará el espacio para permitir una mejor visión de espacio siguiendo el modelo que se instaló en Andén Verde en La Aldea o el de Abrante en La Gomera.
También con el fin de promover la imagen de Valsequillo como destino clave de turismo rural y activo en la isla se propone que para dar a conocer toda esta oferta es importante contar con las asociaciones, clubes de montaña y agencias de viajes especializadas para promover estas visitas. Entre las acciones que se quieren llevar a cabo en este caso figuran la de organizar una jornada para dar a conocer el municipio como destino para la práctica de deportes de naturaleza, otra sobre senderismo a fin de que se puedan dar a conocer cada una de las rutas que se pueden realizar por el municipio, y también otra ya más centrada en visitas a los diferentes recursos patrimoniales y ganaderos que hay en la localidad.
Implicar a las empresas
Para que toda esta oferta de turismo de naturaleza se conozca y llegue a todos los posibles clientes es fundamental contar con la implicación de todas las empresas que de alguna manera participan en esta cadena de valor turística. Con este fin, otro de los ejes que plantea el Plan de Sostenibilidad Turística en Destino de Valsequillo hace referencia a la puesta en marcha de acciones para crear sinergias entre todas las empresas para que el tejido productivo del municipio sea capaz de generar economía y nuevas oportunidades de negocio. También en este caso se aborda la importancia de desarrollar jornadas de concienciación entre agricultores, ganaderos, queseros y demás profesionales del sector primario sobre las posibilidades que ofrece abrir sus instalaciones a visitas educativas o turísticas para ampliar su actividad económica y revitalizar así sus productos . El objetivo es que todos los productores se impliquen en esta apuesta por la oferta de turismo ligado a la naturaleza, y que supone una oportunidad para revitalizar la economía del municipio y de sus habitantes.
