El Cabildo de Gran Canaria ha culminado las actuaciones de acondicionamiento y mejora de la seguridad en las zonas arqueológicas de Balos, en Agüimes, y de Tufia, en Telde, con el fin de garantizar su conservación y protección, con una inversión de 65.425 euros. En concreto, como ha detallado la corporación insular en un comunicado, el servicio de Patrimonio Histórico de la Consejería de Presidencia ha ultimado el proyecto 'Acondicionamiento del cerramiento exterior de la zona arqueológica de grabados rupestres del barranco de Balos', en Agüimes, que ha ejecutado la empresa local Construcciones Santana Alemán con un presupuesto de 37.284 euros.
En el yacimiento Los Letreros de Balos, conocido desde finales del siglo XIX y uno de los más relevantes de la isla en número de paneles y de tipologías de grabados documentados, se ha realizado un estudio por varios autores, que pone de relieve el interés científico-patrimonial de este conjunto rupestre. El yacimiento alberga las inscripciones alfabéticas líbico-bereberes, motivos figurativos (humanas y animales) así como distintos signos geométricos que grabaron los antiguos habitantes de Gran Canaria sobre los afloramientos de basalto del barranco.
El yacimiento de Balos es uno de los más relevantes de la isla en número de paneles y de tipologías de grabados documentados
La importancia de este enclave llevó a que, a finales de los años 80 del siglo pasado, se decidiera vallar una parte del yacimiento para garantizar su seguridad que se ha acondicionado para paliar su deterioro con la base del cerramiento exterior (unos 370 metros lineales) y el camino de tierra por el que se accede a la zona, que había perdido material de relleno y había sufrido el desprendimiento de algunas de las piedras que conforman los peldaños. La corporación ha adelantado que próximamente se implementarán otras acciones dirigidas a difundir y hacer más accesible la riqueza patrimonial de este lugar.
Por otro lado, también ha concluido el proyecto 'Sustitución de puertas en la zona arqueológica de Tufia', en el término municipal de Telde, a cargo de la empresa teldense Construcciones y Promociones Montaña del Fuego SL, con un coste de 28.141 euros. El yacimiento de Tufia, que es uno de los que más visitas públicas recibe, había sufrido deterioro en sus vallas de protección y en las puertas de acceso, debido a las condiciones ambientales.
Por ello, el servicio de Patrimonio Histórico de la corporación insular ha sustituido las dos puertas de acceso para tratarlas con aplicación anticorrosiva de alto rendimiento y esmalte de poliuretano, ha cepillado e implementado un tratamiento antióxido a las armaduras expuestas en el pilar del acantilado y en los elementos de hormigón armado anexos, y en su posterior reconstrucción o reparación, y ha restaurado los postes del vallado.
El conjunto de Tufia está formado por un conjunto de cuevas que se abren sobre el mar y diversas construcciones
Los técnicos del servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo han resaltado que estas acciones ha contado con la colaboración de la Asociación de Vecinos de Tufia y del Ayuntamiento de Telde, y mejoran la seguridad, accesibilidad e imagen del yacimiento. El conjunto arqueológico de Tufia, que fue declarado Bien de Interés Cultural en la categoría zona arqueológica en 1973, está formado por un conjunto de cuevas que se abren sobre el mar y diversas construcciones, entre las que sobresalen estructuras habitacionales concentradas en dos núcleos separados.
Entre todas ellas, destaca una gran construcción cuadrangular, con esquinas redondeadas, de gran perfección arquitectónica, a la que se atribuyen diversas funcionalidades, tales como 'tagoror' o plaza para reuniones o recinto para el ganado, entre otras. Además, destaca como elemento característico la existencia de muros, tanto los que delimitan su exterior del conjunto como los que dividen su espacio interior, lo que confiere singularidad a este conjunto costero.
Para garantizar que las actuaciones desarrolladas en ambos enclaves arqueológicos no afectarán a sus valores singulares, se informó de sus particularidades y de sus implicaciones patrimoniales al personal responsable de las labores, y se llevó a cabo un seguimiento continuado por parte de los técnicos del servicio de Patrimonio Histórico de la institución insular.
