El proyecto Guardianas de los Sabores de Gran Canaria ha fallado sus premios del concurso a las guisanderas de la isla, un certamen que convoca a las mujeres rurales como reconocimiento a su labor de rescate de un saber culinario asentado en el producto local y en el acervo de siglos basado en la sostenibilidad del entorno.
Las bases establecen que las candidatas deben tener entre 40 a 98 años y que se dediquen a la cocina desde la sombra, sin haber obtenido antes un reconocimiento por sus recetas y con residencia en el ámbito rural.
A la cita han acudido doce mujeres de los municipios de Agaete, Agüimes, Arucas, Ingenio, Firgas, Gáldar, Teror y Tejeda, en un proyecto de tres meses dividido en dos fases. Una primera enfocada en la grabación de sus recetas en casa, y una segunda con jornadas en formato concurso en el que se eligieron a las tres premiadas.
Así, el primer premio recayó en un puchero elaborado por Magüi, de Teror; el segundo por un potaje de berros a cargo de Tetén, de la villa de Firgas; y el tercero por un turrón de gofio de Pino Valencia, de la ciudad de Gáldar.
A ellos se añaden el premio a la autenticidad, con una mermelada de naranja de Tina, del Valle de Agaete; el premio a la mujer trabajadora, a Dulces Nublo, de Rosa María, Tejeda; el premio a la originalidad, a la tarta de manzana de Pepa, Firgas; el premio a la elaboración, a la sopa de la virgen de Ana María, de Carrizal de Ingenio; el premio al sabor, al potaje de colino negro, Firgas; el premio a la tradición, para la ropa vieja y torrijas de plátano de Teresa, Arucas; el premio a los condimentos, por las sardinas en escabeche de Beni Castro, de Agüimes; el premio a la innovación, al caldo de burgados de Mari Jose, de Ingenio; y el premio presentación, por las torrijas de Mari Ángeles, de Las Palmas de Gran Canaria.
El concurso ha sido organizado por Chárter 100 Gran Canaria, subvencionado por la Participación Ciudadana del Cabildo y celebrado en el restaurante 5 Chefs.