La Villa de Moya se ha despedido este lunes, hasta el próximo año, de sus tradicionales fiestas en honor a San Antonio de Padua después de tres semanas cargadas de actos religiosos, culturales y deportivos que han estado dirigidos a todos los públicos. Este lunes, el municipio ha celebrado un Tradicional y Popular Sancocho Canario en la zona de La Josefa, una jornada de convivencia vecinal que ha estado amenizada por la Charanga Banda Isleña y los papahuevos. Al finalizar el evento, se dirigirán al Anfiteatro Municipal del Parque Pico Lomito y, luego, se celebrará una verbena a cargo de Haché Tamarindo.
"Estos festejos, en los que hemos recuperado un poco la normalidad de antes de la pandemia, han tenido una gran acogida entre los vecinos y vecinas de Moya y también de otros municipios de la isla que, como cada año, se han acercado a disfrutar de las tradiciones de Moya", destaca el alcalde, Raúl Afonso. Han sido miles de personas las que se han acercado desde el pasado 3 de junio, día de apertura de las fiestas con la lectura del pregón a cargo de Poli Suárez, a disfrutar del amplio programa de San Antonio, dedicado en esta ocasión al Cuadro Artístico Tomás Morales. Este domingo se celebraba también la Solemnidad de San Antonio de Padua con un homenaje al santo en la Iglesia de Nuestra Señora de Candelaria, a cargo del grupo de Bailarines y Tocadores del Norte de la isla de El Hierro, seguido de una misa y una procesión por las calles del casco. Ayer lunes tuvo lugar también una eucaristía por todos los difuntos de la parroquia.
Las Ferias 'Moya Dulce' y de Ganado, el Festival 'San Antonio Suena', verbenas, conciertos y numerosos espectáculos culturales; además de la romería de San Antonio, que atrajo a más de diez mil personas y recolectó más de cuatro mil kilos de alimentos, la Feria de Degustación de Quesos y Productos Locales y el concierto de Café Quijano, que tuvieron lugar este pasado fin de semana en el municipio, han conformado el programa de unos de los festejos más populares del norte de Gran Canaria que se despiden de Moya hasta el próximo año cuando, de nuevo, volverán a dar la bienvenida al verano en la localidad.
