Hay un dicho canario que reza que «San Juan es llorón». Y los agricultores suelen afirmar que esta lluvia «empapa pero no moja». Se habla sobre todo en la cara norte de Tenerife, la más afectada todos los meses de junio y julio por este inviernito con el que suelen comenzar los veranos. Este año, el episodio de temperaturas frescas, nubosidad abundante y llovizna comenzó justo con la llegada del periodo estival, el 21 de junio, y se va a prolongar hasta este fin de semana. Porque desde el lunes, según la delegación de la Agencia de Meteorología (Aemet) en Canarias, los cielos comenzarán a despejarse y las temperaturas empezarán a alcanzar los valores normales de esta época.

Este inviernito lo traen los alisios, los vientos que marcan el clima en el Archipiélago, con chorros de aire húmedo procedentes del norte que alcanzan su máxima intensidad precisamente entre los meses de junio y julio. Así lo explica David Suárez, delegado de la Aemet en el Archipiélago. «Esta nubosidad y estas lloviznas en el inicio del verano son frecuentes en las Islas. En estos últimos días, la situación del anticiclón y de Los Alisios han permitido la entrada de unos vientos cargados de humedad y procedentes del norte». Según detalla Suárez, a partir de mañana, el anticiclón se irá al este y esos flujos húmedos dejarán de llegar a Canarias, con lo que los termómetros subirán y se podrá volver a disfrutar de las playas durante todo el día.

La llovizna prosiguió ayer, tal y como ha ocurrido desde el comienzo de semana. El municipio con más precipitaciones ha sido La Laguna. Ayer por la mañana cayeron 16,6 litros por metro cuadrado. También se mojó Tacoronte, con 8,2. El mal tiempo provocó ayer incluso la suspensión de dos actos en el municipio universitario que se iban a celebrar ayer: La Laguna World Beer, un festival dedicado a la cerveza, y el Paseo Ganadero por La Cañada Lagunera de las Fiestas de San Benito. Sí se celebraron otros al aire libre como la Feria de Artesanía en La Cuesta o la marcha en favor de la lucha contra el cáncer por el casco, organizada por la Asociación Española contra el Cáncer.

Los alisios también se dejaron notar en las temperaturas, con máximas que como el jueves no superaron los 24 grados en Tenerife. Ayer hubo más calor, lo que mezclado con la humedad generó una sensación de bochorno en algunos puntos de la Isla, en especial por el mediodía y a la tarde. Los termómetros marcaron un máximo de 26,4 grados en Güímar y 26,2 en Santa Cruz de Tenerife y el aeropuerto del Sur.