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Día de la Policía Nacional 2022

Día de la Policía Nacional 2022: agente de la Brigada Judicial Almudena Santana, la batalla por una justicia íntegra

Con motivo del Día de la Policía Nacional, la agente de la Brigada Judicial Almudena Santana es condecorada con la Cruz al Mérito por su lucha contra los delitos fiscales

Almudena Santana, policía nacional de la Brigada de la Policía Judicial, conmemorada por el Día de la Policía Juan Carlos Castro

Con razón del Día de la Policía Nacional, la agente Almudena Santana de la brigada de la Policía Judicial es condecorada por su trabajo de investigación contra el blanqueo de capitales. Santana agradece a sus compañeros todo lo que ha aprendido en los 18 años de trayectoria en el cuerpo. «He reforzado los valores de esfuerzo y humildad», explica la agente que suma cuatro años como policía local en Agüimes.

Almudena Santana conoce perfectamente el mundo de los coches de lujo, las casas caras y la joyería de oro. La policía nacional de la Brigada de la Policía Judicial en el grupo de Udef (Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal), investiga los casos de blanqueo de capitales, es decir, aquellos delincuentes que con dinero obtenido de actividades ilegales adquieren estos lujos. Con motivo del Día de la Policía fue galardonada con la medalla de la Cruz al Mérito Policial

«Normalmente, a los delincuentes los detienen y son condenados por las drogas que les quitan en el momento, pero esas personas con esa riqueza compran grandes coches, chalés, barcos y guardan grandes cantidades de dinero en efectivo en sus casas», explica Santana y añade que «todas esas posesiones las mantienen cuando salgan de prisión si no se investiga el blanqueo de capitales». Gracias a las pesquisas realizadas por el grupo del que forma parte la agente, la justicia despoja a los delincuentes de los lujos que han adquirido a través de sus actividades ilícitas. «Es una forma de que el delincuente no salga bien parado, a mí me parece bonito e interesante», opina.

La agente señala que las ostentaciones de los delincuentes son diferentes en dependencia del tipo de delito que hayan cometido: «Si es tráfico de drogas son muy vanidosos y se realizan operaciones de estética, compran mucho oro, coches, barcos y casas». En cambio, en los casos de corrupción o estafa son más discretos, las inversiones las hacen de forma más prudente.  

En el último caso judicializó a unos narcotraficantes con un millón de euros

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Fuentes de información

Para demostrarlo, el grupo de trabajo usa información de Hacienda; tesorería de la Seguridad Social para saber la vida laboral de la persona; las cuentas bancarias; el registro central de la propiedad; registro de Bienes Muebles; la relación de barcos que posee la persona en la Capitanía Marítima y todos los protocolos notariales que tiene la persona. «Esas son solo las básicas y luego con lo que te vaya saliendo de la investigación vas pidiendo más», aclara.

El último caso tratado por Santana ha sido un grupo organizado compuesto por cinco cabecillas dedicados al tráfico de drogas y al blanqueo de capitales. Una vez terminada la investigación por las drogas gestionada por la Udico (Unidad de Drogas y Crimen Organizado), el grupo al que pertenece la agente mantiene una investigación paralela. A los principales detenidos, que estaban localizados en Fuerteventura y tenían otro grupo en Gran Canaria, terminaron expropiándoles más de un millón de euros en propiedades y cuentas bancarias.

Las investigaciones tienen un recorrido de dos años en el que revisan todo tipo de información

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El momento de romper, es decir, cuando cierran el caso en la jerga policial es el mejor momento para la agente. «Sobre todo porque es el momento de demostrar todo el esfuerzo que hemos invertido en el caso porque además suelen ser investigaciones de larga duración, en ocasiones hasta dos o tres años», indica.

Casi tres décadas de servicio

Santana cuenta sobre sus hombros con una trayectoria de 18 años en la Policía Nacional. A los que hay que sumar los nueve años de policía local en Agüimes. La transición de un cuerpo a otro fue con el objetivo de ascender. «Era muy joven y me sentía estancada, así que decidí cambiar y desde que tuve la oportunidad me fui a la Udef que me parecía un reto más interesante», recuerda. 

La agente nunca había pensado en comenzar una carrera en las fuerzas de seguridad, pero tras no poder estudiar el grado universitario que quería decidió probar en la policía, un trabajo que no le quedaba lejos ya que su padre había sido policía nacional. «Él no traía el trabajo a casa porque ejerció en la época de ETA y quería protegernos», señala. 

«Estoy muy agradecida con mis compañeros, no solo con aquellos con los que trabajo ahora, sino también con los que he tenido a lo largo de mi carrera, me han enseñado a nivel personal y laboral valores como el esfuerzo y la humildad», asegura Santana agradecida por la distinción.

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