La Demarcación de Costas de Canarias colaborará con el Cabildo de Gran Canaria para reforzar el vallado en todo el perímetro de la Reserva Natural de las Dunas de Maspalomas con el objetivo de evitar el tránsito indiscriminado de personas por las zonas de exclusión del arenal -las áreas protegidas- y contribuir así a la conservación medioambiental de este espacio. Aunque ya existe perímetro en algunas zonas de la reserva, ese vallado será nuevo en el entorno del mirador de las dunas, ubicado frente al hotel Riu Palace de Playa del Inglés, uno de los espacios más transitados por residentes y turistas y por donde la existencia de un muro de baja altura posibilita el acceso de las personas al arenal pese a estar prohibido justo en este lugar al tener a pocos metros precisamente uno de los inicios de la red de casi ocho kilómetros de senderos habilitados para visitar la reserva.
Así lo anunció este miércoles el presidente de la Corporación insular, Antonio Morales, durante una visita a las dunas de Maspalomas para conocer los avances registrados desde la puesta en marcha en 2018 del proyecto Masdunas, el programa de restauración y mejora del estado de conservación de los hábitats de la reserva. «Costas va a colaborar para vallar el entorno y que no se puede atravesar un espacio que está absolutamente protegido», sostuvo el presidente, quien puso como ejemplo el mirador de las dunas , donde «hay que actuar porque aunque hay señalización, con un muro pequeño la gente no hace caso». «Por eso vamos a hacer un esfuerzo mayor de visibilización del acotamiento, a aumentar los vallados y también incrementar la altura de las vallas existentes en algunos casos», añadió Morales.
Los técnicos han retirado 760 metros cúbicos de flora exótica y eliminado 250.000 tilapias
El proyecto Masdunas se inició en 2018 con el objetivo de evitar el deterioro y la consecuente desaparición del campo dunar y en su primera fase se logró reincorporar en el sistema 60.000 metros cúbicos de arena trasladada desde la punta de La Bajeta hasta Playa del Inglés en tres períodos distintos, en noviembre de 2018 y en mayo y octubre de 2019.
La principal actuación durante el proyecto, además del traslado para reintroducir la arena, es la instalación de captadores del árido, un sistema que genera resistencia al funcionar como una barrera, retiene la arena y la acumula para formar un montículo donde luego se plantan los balancones. Ahora, cuatro años después, el sistema ha logrado captar y retener el 80% de los 60.000 metros cúbicos de arena.
Por otro lado, el conjunto de las seis hábitats de la reserva - la charca, las dunas móviles con vegetación embrionaria, las dunas fijas con vegetación herbácea, losprados húmedos mediterráneos de hierbas altas, las galerías y matorrales ribereños termomediterráneos y el palmeral del Oasis- ha registrado notables avances en su conservación. Y es que los técnicos han conseguido plantar 583 ejemplares de balancones (Traganun moquinii), han erradicado 760 metros cúbicos de flora exótica invasora como la tunera (género Opuntia), el ricino (Ricinus communis), el venenero (Nicotiana glauca) y acacias, además de depredadores introducidos como los gatos asilvestrados, erizos y ratas. Además se han capturado y eliminado 250.000 tilapias de Mozambique de la Charca de Maspalomas y se ha aumentado las parcelas de seguimiento científico de los 15.951 a los 28.730 metros cuadrados, según los datos que arroja el proyecto Masdunas. Además, los técnicos han eliminado también los goros de rocas y la seba, pues afectan a la dinámica de los vientos, responsables de la circulación y recolocación de la arena.
Durante la visita, la directora de la Reserva Natural de las Dunas de Maspalomas, Marta Martínez, destacó el importante proceso de regeneración natural del espacio y recalcó que como resultado de las actuaciones ya se ha producido un aumento de la arena en el frente de las dunas primarias y se han incrementado las zonas de deflación -una cuenca generada por la acción del viento en la retirada del material sedimentario- en el interior del campo de dunas. En la regeneración natural del espacio ha contribuido también la tormenta tropical Hermine que atravesó canarias a finales de septiembre, pues la escorrentía que abrió una zanja en la arena arrastró consigo semillas hacia el interior del campo dunar y ya están brotando hasta 160 nuevos balancones.
Por su parte, el presidente insular, Antonio Morales, destacó el «importante valor mundial» de la reserva natural, donde la Corporación ha invertido casi dos millones de euros en estos cuatro años. «Este espacio que se ha regenerado demuestra que Masdunas ha sido un éxito», sostuvo, al tiempo que subrayó la actuación de los agentes de Medio Ambiente en la protección de la reserva. «Hemos incorporado una vigilancia que nunca se había implantado, y se incorporarán nuevos agentes, pero son 400 hectáreas y, si no se respeta el espacio ni hay colaboración de la ciudadanía, es muy difícil de controlar», lamentó. El presidente valoró el trabajo conjunto entre el Cabildo, el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana y la Demarcación de Costas.
En el marco del proyecto Masdunas, los biólogos han detectado un hongo que está afectando a la supervivencia de los balancones y ya hay algunos ejemplares muertos. El laboratorio de Psicopatología de la Granja del Cabildo trabaja para identificar el hongo y proteger así toda la flora.
Concienciación a los turistas
Morales anunció que para mejorar la acción de vigilancia de las dunas y el proceso de conservación se reunirá con las empresas turísticas para solicitarles más colaboración de cara a informar y concienciar a los turistas sobre la importancia de proteger el espacio y de visitarlo por los senderos habilitados. «Les vamos a insistir en que tengan en la habitación de su hotel toda la información y que sepan que van a estar en un lugar con un valor extraordinario», enfatizó. En el acto estuvo presente Manuel Florido, director del hotel Santa Mónica y vicepresidente de Skal Gran Canaria y del CIT quien ofreció la amplia red de estas organizaciones para difundir los valores del espacio. Por su parte, la alcaldesa Conchi Narváez, coincidió en la necesidad de informar a los turistas «porque todas formamos parte de esta joya y debemos trabajar unidos». | R.T.G.
