Cuando tocan las tres de la madrugada el ganadero Juan Andrés Vizcaíno Guedes pone pie a tierra en Casa Pastores para comenzar a ordeñar su inmensa cabaña de 600 cabras y ovejas. Ahora que es tiempo de partos y preñadas se encuentra con un ojo en las ubres y el otro en los baifos y corderos que se van multiplicando en la corrala aún melosos de placenta.

Pero en los cambios de tiempo aún coge los bártulos y emprende larguísimas trashumancias, periplos en el que las cabras devoran las finas hierbas desde Llanos de Sardina hasta Santa Lucía, rebosando por Rosiana. Y cuando el turno le toca a las ovejas, recorriendo Ingenio, Agüimes, Santa Lucía, y rián para Telde o para su contrario, abajo en San Bartolomé de Tirajana, perviviendo a golpe de garrote y cencerras las antiquísimas rutas de las bestias que se andurriaban desde mucho antes de la Conquista.

Antonio Morales califica a la cita en su inauguración como «un escaparate de oportunidades»

Son siglos de cuajo y de queso, de forma que cuando en el año 1999 la Quesería Guedes, que así se llama, formalizó la burocracia sanitaria que la Unión Europea mandó ratificar, a Juan Andrés Vizcaíno Guedes se le formó un lío en la alacena, un problema de estibaje a cuenta de unos premios que no dejan de llegar, el último de ellos este mismo viernes, cuando le comunicaban a su hermana Loli nada menos que un tercer puesto en el certamen internacional World Cheese Awards al mejor queso curado de leche cruda de oveja y cabra.

Esto era minutos antes de que la propia Loli Vizcaíno terminara de acicalar la carpa con la que se estrenaba al mediodía la 18 Feria del Sureste, cuyo ‘volador’ se tiraba las once de la mañana.

Apenas 34 minutos después había que hacer una paciente cola para alegar del secreto que guardan los Guedes en el redondo de corteza natural.

Auténticas joyas

Son piezas que lucen como joyas, de cuajo de baifo, con la difícil leche cruda en todas sus mezclas y sal, «nada más», en el que, entre otros, también figura el único media flor de la mitad meridional de Gran Canaria. El resultado es que unas muestras a modo de cata espichadas con su correspondiente palillo actúan como engodo de cabosos. Y el que prueba sí o sí, se lleva un trozo.

Pero el premiado puesto internacional de los Guedes no es el único de los 160 que desde ayer permanecen abiertos hasta el domingo que es digno de podium, como así lo subrayaban en la apertura oficial de la cita el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales; la presidenta de turno de la Mancomunidad del Sureste y alcaldesa de Ingenio, Ana Hernández; y los presidentes de las corporaciones de Agüimes y Santa Lucía, Óscar Hernández y Francisco García. A ellos les acompañaba en el escenario de la plaza de Los Algodoneros Juan Pérez, presidente de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Vecindario, (Ascoive), y el gerente de la organización supramunicipal del sureste, Rafael Sánchez, entre otros.

Así, para Morales, la feria resulta «un gran escaparate de todas las oportunidades que ofrece el sureste de la isla», resaltó, para defender un formato que considera «importante porque genera cauces de comercialización para los productores».

El presidente del Cabildo concluyó advirtiendo que «estamos ante una situación muy crítica a nivel planetario, por lo que, cuando hablamos de romper las dependencias del exterior, situaciones como las que estamos viviendo nos dan más razones que nunca para mirar al mundo rural, a la agricultura y a la ganadería y por tanto para consumir producto local», según expresó.

«El mejor punto de encuentro»

Por su parte, para Ana Hernández, la cita, además del «mejor punto de encuentro de este fin de semana», la cita responde al «indiscutible» apoyo al sector primario y los artesanos que, según subraya, es aún más necesario después de la pandemia, todo ello en un «espacio magnífico», el de la zona peatonal de la avenida de Canarias de Vecindario.

La Quesería Guedes inicia el día con un sonado bronce en la prestigiosa World Cheese Awards

Dentro de una Santa Lucía de Tirajana que se encuentra, además, en época de sustanciosas cosechas, como subrayaba su alcalde en la presentación, aludiendo a la zafra de la aceituna y de las naranjas, y por tanto, en el mejor momento para mostrar «la buena calidad de nuestros quesos, de la sal, la repostería», entre otras exquisiteces que ofrecen los tres municipios mancomunados.

Hernández abundó en el trabajo «a destajo», que han venido realizado los participantes en la muestra durante los últimos días para exhibir sus producciones, en la que es la segunda edición de este año, una ‘aceleración’ que responde a las citas fallidas por la pandemia, y para adelantar que el gran próximo encuentro de la Feria del Sureste se realizará en Carrizal de Ingenio en el próximo mes de marzo, atendiendo en que se celebre allí donde toque la presidencia de turno de la Mancomunidad.

Una fiesta y un escaparate de productos de la tierra

Por último, el regidor de Agüimes sugería un simbólico cambio de denominación de feria a fiesta, como él confiesa llamarla, subrayando en la presente edición «las magníficas condiciones» en las que se celebra esta 18ª edición, en el que se logra así alcanzar su objetivo fundacional, el del «impulso al desarrollo económico vinculado a las ciudadanía». Hernández coincide con Morales al calificarla como un excelente escaparate donde «mostrar lo que se produce en nuestra comarca y para fidelizar a las personas que puedan adquirir estos productos».

Productos como los de su propia villa de Agüimes, entre los que destacaba ayer por un colorido que delataba una calidad de primera, las frutas de la agricultora María Belén Gutiérrez, en un puesto comandado por Ángela Alemán. De los altos de Guayadeque, exhibidos cajas y ceretos, figuraban los caquis carmesí, las chirimoyas, los mangos XXL, la guayaba «a dos euros», el tuno indio, la manzana, la calabaza, la aceituna y un sindios parido por matos de todos los colores a los que da hasta pena morder.

Pan de puño

O los que exhibía Ingenio, entre los que brillaba con pinta propia los panes de puño de Amaro, que no en balde han sido destacado como de los cinco mejores de España. Allí, Laura Cárdenes daba algunas pistas de su secreto mientras despachaban a mansalva y matalauva. Y es que una parte de la clave del éxito se centra alrededor de un horno de más de 250 años que aún sigue dando fosnalla de la buena. En su estante, el pan de puño tal cual, pero también las tortas de millo, de batata, los queques, o el pan bizcochado, que no se elabora con remanentes, sino exprofeso, «y está espectacular», según Cárdenes y la ristra de clientes que se arremolina a remolque de un aroma no apto para un mediodía en ayunas.

Todo ese elenco lleva detrás el trabajo «a destajo», al que aludía la alcaldesa de Ingenio, con un turno de fuego que comienza a las nueve de la noche y que es reemplazado por otro a las cinco de la mañana, con repartos a los cuatro puntos cardinales de Gran Canaria.

A este muestrario se añaden actividades como Cocinando El Sureste, que este sábado se ofrece de 11.00 a 134.00 horas, con catas de aceites, quesos, cervezas, aliños y recetas antiguas. También se programan juegos tradicionales, de 11.00 a 13.00 horas, y por la tarde, de 17.00 a 18.00 horas. O teatro de títeres del Cancionero Isleño, que hará las delicias de los más pequeños con el grupo Borondona y sus amigos, con funciones prácticamente durante todo el día, desde las 11.00 horas a las 18.30 horas.

Los Sabandeños y Los Gofiones

El colofón lo ponen los grupos y solistas que actuarán en el escenario principal a partir de las 20.00 horas, con turno este sábado para Los Sabandeños y Los Coquillos, éste último a partir de las 21.30 a las 23.00 horas, para dar paso el domingo a partir del mediodía a Los Gofiones. Todo ello aliñado por parrandas dando ambiente a todo el recorrido de la feria, y la muestra ganadera, de la que se podrá disfrutar a partir de las 10.00 horas.

Hay que señalar por último que permanecen abierta cinco áreas para aparcamientos, todas ellas fácilmente accesibles desde la zona peatonal de la avenida de Canarias. Esto en previsión de una asistencia, que según afirma la Mancomunidad del Sureste, espera superar las 100.000 personas que visitaron la cita anterior que tuvo lugar en el mes de junio, para un fin de semana en que recuerda que todas las actividades que se ofrecen son gratuitas.