El área turística de Playa del Inglés, en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, necesita rehabilitar al menos 5,5 kilómetros de las redes de saneamiento debido a su avanzado estado de deterioro, después de más de 50 años en servicio, desde que comenzase a construirse esta parte de la urbanización turística años después de la primera piedra en San Agustín. Desde entonces apenas se han renovado estas redes que dan servicio a centenares de apartamentos, hoteles y viviendas residenciales más allá de sustituciones puntuales en algunos espacios. Y así se lo ha hecho saber al Ayuntamiento Canaragua, la empresa concesionaria de la gestión del servicio municipal de aguas, que a petición del Consistorio ha remitido un informe de necesidades que entre otras cuestiones incluye la creación de un gran depósito regulador de agua, el traslado de la depuradora de Las Burras, la renovación de dos emisarios submarinos y la realización de un estudio de alternativas para elevar agua desalada hasta los barrios de medianías situados por encima de Tunte ante la sequía de los pozos.
En el marco de este conjunto de peticiones, el Ayuntamiento ya ha sacado a licitación la redacción del proyecto para mejorar la red de saneamiento de la Avenida de Tirajana, una de las principales arterias que vertebran Playa del Inglés, donde se pretende actuar en 1,4 kilómetros en la que será la primera gran obra de sustitución en la zona turística. El objetivo es sustituir las viejas y deterioradas tuberías de fibrocemento por otras nuevas de PVC, pues las actuales han sufrido durante décadas las consecuencias de la agresividad de las aguas residuales, que contienen gases que deterioran la red hasta el punto en que en algunos tramos la tubería ya ni siquiera existen y tan solo queda el hueco formado por la compactación de la tierra.
En algunos tramos ya no hay tubería y existe riesgo de hundimiento de la calzada
Toda la red de la zona turística de Playa del Inglés está obsoleta y existe incluso riesgo de hundimiento de la calzada, además de que el derrumbe del material de las tuberías dificulta el paso del agua y la limpieza, por lo que en ese informe que Canaragua presentó al Consistorio destaca también la necesidad de actuar sobre 1,5 kilómetros de la Avenida de Estados unidos, un kilómetro en la Avenida de Bonn, 850 metros en Sargentos Provisionales, 300 metros en la calle Alemania, 260 metros en la Avenida Gran Canaria, y 85 metros en la Avenida de Madrid, además de 100 metros en el Barrio Chico de El Pajar, según ha revelado Jaime Planells, director de zona de Canaragua en el municipio de San Bartolomé de Tirajana. La mayor parte de las grandes intervenciones solicitadas por la gestora del servicio público de aguas están vinculadas a la zona turística porque son las infraestructuras más antiguas y porque son las que soportan una mayor demanda dada la alta cantidad de población local y flotante a la que da servicio. De ser atendidas por el Ayuntamiento y de llevarse a cabo, en el conjunto de estas intervenciones será necesaria una inversión de 2,2 millones de euros, según estima la concesionaria.
Otras necesidades
Entre todas las infraestructuras hidráulicas necesarias para modernizar y mejorar el servicio público de aguas de San Bartolomé de Tirajana la más importante, señala Planells, es la construcción de un gran depósito regulador que permita al municipio contar con una reserva de 120.000 metros cúbicos de agua para abastecer a la población durante al menos siete días en caso de corte de suministro. «La creación de este depósito es vital», afirma, y aunque matiza que una interrupción del suministro es muy difícil que ocurra porque el municipio cuenta con dos desaladoras, éstas podrían verse afectadas, por ejemplo, en caso de un escenario de cero energético.
En la urbanización turística, Canaragua también solicita al Ayuntamiento el traslado de la estación depuradora de aguas residuales ubicada en Las Burras, junto a la GC-1, pues con el crecimiento urbanístico turístico la planta ha quedado ya dentro del entorno urbano, con lo que eso supone para una infraestructura que por su naturaleza genera malos olores. Así, propone el traslado fuera de la urbanización. Por otro lado, también considera necesaria la renovación, a corto plazo, de los emisarios submarinos de El Cochino y Playa de Las Mujeres, pues ya están finalizando su vida útil.
Canaragua reclama la construción de un gran depósito regulador de agua para el municipio
Respecto a otras zonas del municipio, como el área de medianías, la concesionaria ha solicitado al Ayuntamiento que ponga en marcha un estudio de alternativas y redacción de proyectos para dotar de las infraestructuras necesarias para llevar agua desalada desde Tunte a todos los depósitos de agua potable de El Sequero, Agualatente, Risco Blanco, La Culata, Lomito Taidía, La Sabina, Los Lomillos, La Plata, Cercados de Araña y Ayacata. Se trata de barrios que tradicionalmente se han abastecido de aguas procedentes de pozos y galerías donde el líquido ha ido mermando año tras año. Y con la sequía van a peor.
Lo mismo ocurre en Ayagaures, donde solicitan que se estudien alternativas para abastecer a todas las casas que se distribuyen por el barranco con agua desalada debido a que pozos presentan una alta concentración de salinidad.
En el ámbito de la implementación de las infraestructuras hidráulicas, el Ayuntamiento ya está trabajando también en la prolongación de la red de abastecimiento de aguas entre Fataga y Arteara, una necesidad que los vecinos de este pueblo llevan reclamando más de 12 años y que en pleno 2022 siguen abasteciéndose con cubas. Ya se ha adjudicado la redacción del proyecto.
