San Bartolomé de Tirajana

El centro comercial Plaza de Playa del Inglés quiere reabrir antes de Semana Santa con la vista en una futura reforma

Los propietarios harán un nuevo intento tras dos años cerrados para renovar la instalación eléctrica tras un incendio - «Poca ayuda» de la Administración

Imagen de archivo del precinto municipal al centro comercial Plaza de Playa del Inglés, que aún permanece cerrado.

Imagen de archivo del precinto municipal al centro comercial Plaza de Playa del Inglés, que aún permanece cerrado. / Juan Castro

Los propietarios de los negocios que se encuentran en el Centro Comercial Plaza, ubicado en pleno corazón de Playa del Inglés, quieren volver a abrir sus establecimientos como muy tarde en Semana Santa, aunque su intención es regresar a la actividad antes de esa fecha. Y lo harán después de más de dos años cerrados al público, desde que en enero de 2021 un incendio en uno de los locales, que provocó daños en otros cinco establecimientos, afectase al cuadro eléctrico del edificio y se viesen obligados a reparar la instalación eléctrica de todo el inmueble. Los trabajos realizados hasta ahora han abordado la actualización del sistema eléctrico, pero los empresarios tienen la vista puesta en una próxima renovación del inmueble. «Tenemos idea de renovar el centro comercial, pero no podrá ser algo inmediato porque venimos de gastar grandes sumas de dinero en las reparaciones», señala Jéssica García, administradora del complejo, «tenemos que modernizarnos y hacer un esfuerzo en tiempos venideros para ofrecer un producto nuevo al público».

Imagen de archivo del precinto municipal al centro comercial Plaza de Playa del Inglés, que aún permanece cerrado.

Imagen de archivo del precinto municipal al centro comercial Plaza de Playa del Inglés, que aún permanece cerrado. / Juan Castro

Este será el segundo intento de apertura que hagan los empresarios después de un primer intento hace un año, frustrado por la «lentitud» de la aseguradora del edificio, señala la responsable, en el abono de las indemnizaciones para poder acometer las obras.

En los trabajos, los empresarios se han gastado más de 600.000 euros, 400.000 abonados por la aseguradora del complejo comercial y el resto desembolsado por los propietarios. Las obras han consistido en la sustitución y reparación de todo el entramado eléctrico del edificio, pues el incendio en uno de los locales afectó al cuadro eléctrico y a unas instalaciones muy antiguas que se han tenido que actualizar para adaptarlas a la legislación vigente. También se han actualizado las instalaciones de los sistemas contraincendios y se ha tenido que renovar la cartelería, parte de la galería comercial que discurre por el interior del edificio, lucernarios, las zonas de contadores y los falsos techos, pues todo quedó arrasado por las llamas.

Demora y críticas

La comunidad ha aprovechado para cambiar también las jardineras que se encuentran bordeando toda la cubierta del edificio en su parte central, pues durante años, en días de lluvia, han ocasionado problemas de filtraciones hacia los locales de las plantas más bajas; por ello se ha instalado un sistema de impermeabilización.

Las obras han tenido un coste de más de 600.000 euros abonados por el seguro y propietarios

En los últimos tres años, el centro comercial solo ha estado abierto seis meses, entre julio de 2020, cuando reabrió tras el cierre por el confinamiento, y enero de 2021 cuando cerró por el incendio. En este tiempo han sido numerosas las voces críticas con el cierre y el estado de conservación de los centros comerciales turísticos más antiguos del sur, sobre todo desde el propio sector turístico, que reclama una profunda modernización de estos espacios.

Imagen de archivo del precinto municipal al centro comercial Plaza de Playa del Inglés, que aún permanece cerrado.

Imagen de archivo del precinto municipal al centro comercial Plaza de Playa del Inglés, que aún permanece cerrado. / Juan Castro

La demora en la reapertura se debe, afirma Jéssica García, a que el seguro ha pagado a plazos y los empresarios, afectados inicialmente por el confinamiento y la posterior merma de ingresos por la caída en la llegada de turistas, no disponían de liquidez para adelantar todo el dinero a los contratistas. Sí que han colaborado, afirma la administradora, los empresarios que disponían de más recursos al contar con otros negocios fuera del centro comercial.

«Los empresarios tienen voluntad de no quedarse quietos»», señala García

Frente a las críticas por el estado del Plaza, García sostiene que, una vez culmine la obra y se abra al público, habrá propietarios que lleven a cabo intervenciones de mejora en sus negocios. «Me consta», sostiene. «Los propietarios quieren sacar el centro comercial adelante; nunca se ha abandonado el centro comercial, como se ha dicho, ni por parte de los empresarios ni por parte de los administradores», señala García, quien sí lanza un dardo a las instituciones públicas. «Sí que hemos notado que en esta mejora no hemos tenido ninguna ayuda de la Administración Pública, pero no por eso hemos ni vamos a tirar la toalla», añade, «los propietarios tienen una gran voluntad de no quedarse quietos de ahora en adelante para que el esfuerzo que han hecho ahora no sea en vano». 

A la espera de que la administración decida la fecha de reapertura, el centro comercial se mantiene precintado, un precinto municipal que llegó tras discrepancias entre la administración y empresarios del ocio nocturno por el uso de grupos electrógenos para poder abrir sus negocios de noche, aparatos que la dirección consideraba incompatibles con las obras de los sistemas eléctricos y que denunció a Industria y al Ayuntamiento.

Suscríbete para seguir leyendo