Gian Luca Zecchetto (Verona, Italia, 1963) es un empresario inmobiliario residente en Gran Canaria desde hace 20 años que preside la Asociación de Empresarios Italianos de Canarias y la de Exportadores e Importadores, organizaciones creadas en los últimos dos años que aglutinan a unas 40 empresas. Las organizaciones están bajo el paraguas de Fedasur, la Federación de Asociaciones de Canarias Atlántico Sur.
Hace año y medio nació la Asociación de Empresarios Italianos en Canarias, hace menos de un año la de Empresarios de Exportación e Importación Italianos y hace tres meses la de emprendedores. ¿Qué atrae a tanto empresario italiano a instalarse en Canarias?
La situación económica en Italia siempre es dura y hay muchas trabas para impulsar un negocio. Sin embargo, aquí son todo facilidades, sin palos en las ruedas, y además la fiscalidad es mucho más baja: en Italia es del 75% frente al 25 o 30% de Canarias, dependiendo de la actividad. Así que allí no se puede vivir, tristemente; cada euro que un empresario invierte aquí le da una rentabilidad mucho mayor. 20 años en la isla me han dado más que 40 en Italia. También es atractiva la gestión del papeleo porque es mucho más ágil; yo voy al Ayuntamiento y todo es rápido y fácil, así que quien se queja de los ritmos de las administraciones públicas canarias es porque no sabe lo que hay fuera. Además nos atrae el clima, este es muy buen lugar para vivir.
¿Y cómo llegan a conocer los empresarios italianos las ventajas de nuestra fiscalidad?
Porque ya hay muchas empresas aquí creadas por italianos que promocionan en mi país los beneficios de invertir en Canarias. Cada italiano que viene es un prescriptor de las ventajas fiscales y de la posibilidad de poder vivir en buenas condiciones. Yo por ejemplo tengo una consultora inmobiliaria y busco el mejor producto para cualquier inversor que me dice que quiere venir hasta aquí; ese asesoramiento atrapa a los inversores, que acaban decidiendo que este es el mejor destino para mover su dinero.
Los italianos empezaron sobre todo en el sector de la restauración, pero ¿en qué sector está hoy la fortaleza del empresariado?
Solo en San Bartolomé de Tirajana hay unos 600 pequeños empresarios italianos, y en Canarias estaremos en torno a 3.000. Aquí arrancamos en la hostelería, con mucha pizzería, y ese sector sigue teniendo un peso muy importante entre los empresarios italianos, porque más del 50% de los negocios son de restauración. Pero también está creciendo el sector inmobiliario con la compra de casas para destinarlas a viviendas vacacionales, aunque eso puede ser peligroso de cara al alquiler para residir a largo plazo, y los sectores de las energías renovables y la agricultura. Ahora mismo tengo un inversor que está buscando terrenos para impulsar la producción de energía fotovoltaica. Y otro que compró un terreno en Telde para plantar frutas y verduras ecológicas que luego vende.
"Más de 150 millones de euros no se han invertido aún porque se buscan oportunidades", afirma
Imagino que sobre todo prima el negocio inmobiliario.
Exactamente. Hay muchos inversores que están buscando terrenos para construir y renovar apartamentos y edificios. Después de la pandemia, el interés de los inversores por colocar su dinero en las islas ha crecido un 200%, pero también ha crecido el mercado de los inversores holandeses, suecos y franceses. Se interesan por el negocio inmobiliario porque quieren dejar su dinero en un producto sólido y no en el banco. Solo los empresarios que se interesan por invertir en suelos en San Bartolomé de Tirajana, Mogán y Las Palmas de Gran Canaria para desarrollar proyectos ha aumentado un 80%.
¿Cuánto dinero italiano está esperando a poder ser invertido en Gran Canaria?
Más de 150 millones de euros no se han invertido aún porque están buscando oportunidades, y no es fácil encontrar la mejor opción y que ofrezca la mayor rentabilidad. Ahora mismo hay una empresa de Roma que está valorando suelos en Gran Canaria para invertir 40 millones de euros y hacer negocio. Hay muchas empresas en Italia que tienen mucho dinero para invertir.
¿Cuánto tiempo puede pasar entre que un inversor le echa el ojo a un suelo y lo puede desarrollar?
Si el suelo ya está listo, entre que se tramita toda la documentación de la obra como máximo un año.
¿Son gente que mantiene su empresa en Italia o invierte aquí todo su ahorro?
La mayoría, los grandes inversores, mantienen un equilibro, pero los pequeños propietarios se lo traen todo y lo invierten aquí. Hay sobre todos muchos autónomos y pequeñas y medianas empresas.
¿Canarias tiene alguna debilidad?
Sí, sin ofender, en muchos casos los empresarios están anclados al pasado y no apuestan por la renovación. Las administraciones públicas deben impulsar la modernización, no vale que empresas que han estado 30 años explotando un complejo no lo renueve y ofrezca un producto actualizado a los turistas. No obstante, sí que hay otros tantos empresarios que han llevado a cabo esa tarea.
Los inversores que se han interesado por colocar su dinero en las islas han crecido un 200%
Además de la asociación de empresarios italianos, también codirige la de empresarios italianos exportadores e importadores. ¿Cómo surge?
Está conformada por una decena de empresas y nace de la necesidad que tenemos de unirnos para facilitar la tramitación en la importación de vehículos. Esa es la mayor parte del negocio, pero también nos hemos adentrado en la importación y exportación de productos como el azúcar o el papel. Y el negocio ha sido con el resto de España, con Italia y también con Cabo Verde.
¿A qué aspiran las dos organizaciones empresariales?
Que sea un faro para los empresarios italianos que quieran establecerse en las islas y que no sepan moverse. El hecho de estar bajo el paraguas de Fedasur facilita mucho la tramitación de documentación y que los empresarios quieran abrir aquí sus negocios.