En diciembre de 2022 una familia canaria murió en un accidente de tráfico en Rumanía. El siniestro fue provocado por un conductor que intentó hacer un adelantamiento en una zona prohibida. Esto ocasionó que arrollase con su vehículo el coche en el que viajaba la familia grancanaria que estaba en el país donde una de las hijas, estudiante de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) se encontraba realizando el Erasmus.
El Tribunal de Sibiu ha condenado a 20 años de prisión a Ion Sporici, el conductor responsable al accidente por un delito de homicidio. La justicia rumana lo condena también a pagar 850.000 euros como una indemnización por daños morales a los familiares directos de las víctimas.
El conductor ignoró las señales de tráfico
Los cuatro miembros de la familia grancanaria, residente en el barrio capitalino de Hoya Andrea, sufrieron un siniestro al colisionar frontalmente con el vehículo en el que viajaban contra un todoterreno que adelantaba en una curva con doble línea continua. Cristina, de 15 años, había viajado con sus padres José Rodríguez (67) y su madre María del Carmen Rodríguez (55) a la ciudad de Sibiu para visitar a su hermana Alicia del Carmen, de 21, estudiante del cuarto curso del Grado de Educación Primaria de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y que se encontraba realizando el programa Erasmus en el país centroeuropeo.

El siniestro ocurrió en la carretera nacional DN1 que conecta Bucarest, la capital del país, con Sibiu, Cluj-Napoca y la frontera con Hungría. A la altura de Sibiu, un turismo invadió el carril contrario para sobrepasar a otro pese a que había una doble línea continua. En el sentido correcto circulaba a bordo de un Dacia Logan alquilado por la familia residente en el barrio capitalino de Hoya Andrea. El coche era conducido por Alicia, que no pudo evitar el impacto frontal y colisionó además contra un muro de hormigón. Otro coche que iba por detrás se empotró contra la parte trasera del automóvil en el que viajaba la familia canaria.
El coche era conducido por José, que no pudo evitar el impacto frontal y colisionó además contra un muro de hormigón. Otro coche que iba por detrás se empotró contra la parte trasera del automóvil en el que viajaba la familia canaria.

Los servicios médicos confirmaron en el lugar de los hechos las muertes de José y María del Carmen. Los sanitarios consiguieron evacuar con vida a la estudiante universitaria hasta el hospital, donde finalmente se confirmó su fallecimiento debido a la gravedad de las heridas que presentaba. Por su parte, la pequeña Cristina, estudiante del colegio San Juan Bosco de Las Palmas de Gran Canaria, ingresó en estado de coma, según precisaron los medios de comunicación rumanos. Estos precisaron, citando a fuentes del centro hospitalario, que su estado es crítico. Dos días después falleció.
Sólo un día después de que ocurriera este accidente, la ciudad de Sibiu registró otra tragedia en una autopista donde una persona falleció en la colisión de dos coches.
«Era una familia ejemplar»
Tras conocerse la tragedia, el Colegio San Juan Bosco y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) mostraron su dolor. Las hijas del matrimonio de los Rodríguez Rodríguez, Alicia y Cristina, de 21 y 15 años respectivamente, habían sido alumnas del centro conocido popularmente como «árbol bonito» y la mayor estudiaba el último curso del grado de Educación Primaria.
«Se han ido dejando huella», destacó en su momento el director del San Juan Bosco, Gonzalo Alemán Foronda. «La clase de Cristina está muy tocada y quieren hacer gestos de honra», indica, motivo por el que mañana habrá un acto de homenaje en el centro con los alumnos de 4º ESO, compañeros de la menor de la familia.

Alemán Foronda destaca de Cristina que esta era «súper alegre e involucrada en el centro», de hecho, formaba parte del Consejo Escolar y era pre animadora de alumnos más pequeños los viernes por la tarde. Además, estaba organizando junto al AMPA la graduación del colegio. «La hermana era igual, cortadas por el mismo patrón, Alicia hizo las prácticas el curso pasado y ayudaba en todo lo que hiciera falta», resaltó el director.
«Los padres apoyaban las decisiones del centro, estaban muy implicados con todo», indicó. Las pequeñas estudiaron en el Árbol Bonito desde los tres años; el próximo 20 de diciembre tienen previsto realizar una eucaristía en recuerdo de toda la familia, aunque por el momento están buscando parroquia, «el colegio se quedará pequeño».
El rector de la ULPGC, Lluis Serra Majem, por su parte, mostró en su cuenta de Twitter su «gran consternación ante el fallecimiento de esta familia canaria. Mi apoyo a la familia de nuestra estudiante». La institución envió a sus alumnos un mensaje de condolencias. La joven Alicia, estudiante de Educación Primaria, se encontraba realizando un programa de Erasmus en Rumanía durante lo que iba a ser su último curso lectivo.