Gáldar

Seis años de papeleos para construir una planta de tratamiento de fangos

El Cabildo reactiva el expediente de un proyecto para aprovechar aguas residuales en Botija de Gáldar, tras una sentencia judicial a favor de la empresa

Terrenos de Botija, en la costa de Gáldar.

Terrenos de Botija, en la costa de Gáldar. / LP / DLP

Javier Bolaños

Javier Bolaños

Las Palmas de Gran Canaria

El Cabildo de Gran Canaria tramita la declaración del interés público y social de un proyecto para la instalación y explotación de una planta aislada de tratamiento de fangos deshidratados mediante secado solar con medidas de control de impacto ambiental, en Botija, en Gáldar, promovido por la empresa Debeocan, después de seis años de papeleos. La iniciativa, que se implantará en suelo municipal, cuenta ahora con el aval de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) en la que se declara «que no existe prohibición expresa del Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria para la instalación», por lo que la consejería insular de Política Territorial y Paisaje ha tenido que darle curso de nuevo y retrotraer el expediente para determinar su viabilidad. 

El proyecto de la planta de lodos entró en las oficinas del Cabildo el 12 de abril de 2019, después de que ya en diciembre de 2018 se emitiera un informe técnico municipal que remitía el expediente para su decisión al Cabildo. 

Ayagaures, SAT Y Galobra

A partir de entonces la documentación ha pasado por múltiples departamentos de la institución insular, del Gobierno de Canarias y del Ayuntamiento de Gáldar, que emitieron decenas de informes. A esto se suma la presentación de alegaciones por la entidad Ayagaures Medioambiente, que en el trámite de información pública se opuso al proyecto «por razones técnicas y legales». 

No fue el único. El 18 de noviembre de 2019 también presentó alegaciones la mercantil Sociedad Agraria de Transformación 6979 Botija, oponiéndose a la autorización del proyecto «por afección a la actividad agrícola desarrollada por la alegante». 

 El 9 de marzo de 2020, la empresa municipal Galobra presentó un escrito en el que mantiene su conformidad con la cesión realizada, así como la puesta en marcha y desarrollo de la actividad. 

¿Existe o no prohibición?

El resultado fue que el Servicio de Planeamiento declaró el 21 de enero de 2021 «La existencia de prohibición expresa por el planeamiento insular y, en consecuencia, que no procede pronunciamiento sobre el Interés Público o Social de la actuación denominada», y desestimando, consecuentemente, la solicitud presentada por el Ayuntamiento de Gáldar de “declaración sobre existencia o no de prohibición en el planeamiento insular y sobre el interés público o social”. 

 Sin embargo, la empresa acudió a la Justicia, y el 10 de mayo de 2024, la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia de Canarias sentenciaba que la obra «no se encuentra prohibido por el planeamiento insular»

Ante esta resolución, Política Territorial acaba de sacar de nuevo a exposición el proyecto, apreciando «su carácter excepcional, teniendo en cuenta que la parcela en la que se ubica la planta es de titularidad municipal, que está ubicada en suelo rústico y que el propio Ayuntamiento de Gáldar, a través del debido concurso público, promueve destinarla a arrendamiento, a fin de que en la misma se instale la planta de lodos».

Claves del proyecto

1. Energías limpias y abono

El proyecto original de Debeocan contempla una planta de tratamiento de los lodos que generan las depuradoras de aguas mediante el secado solar natural, para su aprovechamiento posterior como fuente de energía limpia y abonos agrícolas. La ubicación escogida es el antiguo vertedero de Botija de Gáldar.

2. Ocho mil toneladas

Contempla dos módulos con una capacidad para tratar hasta 8.000 toneladas al año, y una zona de almacenamiento temporal del material ya tratado para 1.700 toneladas. El objetivo final de la empresa era alcanzar el vertido cero, es decir, sacar provecho de todos estos residuos, evitando con ello un problema ambiental.

3. Apoyo científico e institucional

La compañía arrendó al Ayuntamiento de Gáldar una parcela de 5.434 metros cuadrados en la costa de Botija, y su proyecto iba ligado al Parque Científico Tecnológico de la Punta de Gáldar, gestionado por la Mancomunidad del Norte, además de contar con el apoyo de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y empresas.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents