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"Dos placeres en uno": este obrador de Gran Canaria ha creado la cookie más sorprendente del año

Así son las nuevas galletas rellenas que están conquistando a los golosos más exigentes

Madriguera Obrador en el CC Las Ramblas

Madriguera Obrador en el CC Las Ramblas / José Carlos Guerra

Johanna Betancor Galindo

Johanna Betancor Galindo

Las Palmas de Gran Canaria

Cuando creíamos haberlo visto todo en repostería, desde el corazón de Las Palmas de Gran Canaria nos llega una creación capaz de borrar el recuerdo de cualquier cookie anterior. Su aspecto es el de una galleta crujiente y clásica. Pero su interior esconde una sorpresa cremosa: una tarta de queso en miniatura, fundida con precisión y envuelta en masa artesanal.

El encargado de desvelar esta delicia ha sido el creador de contenido Víctor G (@vrglez_), quien no ha podido contener la emoción al probarlas. “Te presento las nuevas cookies rellenas de tarta de queso. Es la mezcla de dos de las cosas que más me pueden gustar probablemente a nivel de postre”, confiesa en su vídeo, entre mordiscos y gestos de asombro. “No puedo describir la pedazo maravilla que me parece esta invención. Tienen que probarlo, van a flipar en colores”.

Galletas que se derriten en el alma

El obrador donde nace esta obra de arte no es una pastelería cualquiera. Se trata de Madriguera, un espacio cálido y sofisticado en el Centro Comercial Las Ramblas, dirigido por la joven pastelera Iballa Toledo. Desde su apertura, este pequeño paraíso repostero ha conquistado a locales y visitantes gracias a una propuesta que combina tradición europea y creatividad global.

“Probablemente sea uno de los postres que más me ha sorprendido últimamente. Estoy flipando”, asegura Víctor G mientras muestra cómo el relleno cremoso de cheesecake se funde con la galleta tibia. El resultado es textura, sabor y emoción en un solo bocado.

De Barcelona a Las Vegas

Detrás de este éxito hay una historia de formación, pasión y regreso a casa. Iballa Toledo se formó en la prestigiosa Escuela de Pastelería del Gremio de Barcelona, y tras cuatro años de formación rigurosa, obtuvo una beca para especializarse en chocolate con la reconocida chef Melissa Coppel en Las Vegas.

Ese conocimiento técnico se palpa en cada creación de Madriguera. Desde pasteles de frutas con especias como cardamomo o piña, hasta bombones artesanales y cookies de triple chocolate, todo en este obrador se elabora a mano, con ingredientes de altísima calidad y una precisión que se percibe en cada detalle.

“Es un obrador estéticamente agradable porque ya me he pasado muchos años en sótanos, sin ver la luz del sol”, declara Iballa, quien diseñó su espacio de trabajo como un taller abierto al disfrute de la vista y el paladar.

El obrador donde cada bocado es un vicio

Más que una pastelería, Madriguera es un laboratorio de sabor. Su gran mesa central, visible desde el local, es el corazón del negocio, allí nacen las texturas perfectas, los glaseados impecables y las palmeras con capas infinitas de hojaldre. Un lugar donde cada dulce parece una escultura, pero al morderlo, revela su alma auténtica.

“Todo está hecho a mano, todo 100% artesano”, insisten desde el obrador. Y se nota porque al probar sus cookies rellenas, uno no piensa en marketing ni en modas virales. Solo cierra los ojos y deja que la mezcla de sabor, técnica y nostalgia lo envuelva.

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