La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria condenó ayer a la pena de cinco años de prisión a un ciudadano mauritano, Abderrahmane A. D., que, en el transcurso de una pelea, le arrancó a otra persona la oreja derecha de un mordisco. Con anterioridad a esta agresión, el condenado había golpeado repetidas veces en el rostro a un cliente del bar con el que mantenía una disputa sentimental.

Los hechos que se consideran probados sucedieron durante la madrugada del 14 de noviembre de 2008 en el bar Hawaian, en Puerto del Carmen. Aquella noche, en torno a las dos de la mañana, el condenado entró en el establecimiento, al que le tenían vedado el acceso y "abordó a la víctima, Joop T. E., que mantenía relaciones con la chica que previamente había sido pareja del acusado y le golpeó en repetidas ocasiones el rostro", explica la sentencia.

Al concluir el ataque, "los camareros intentaron calmarle fuera del local, intentando que no volviera a entrar". En aquel momento, se aproximó al grupo, "no se sabe con qué finalidad, quizás para curiosear", sigue la narración de los hechos, Vasco A., quien sufrió a manos de Abderrahmane un mordisco que le arranco "casi toda la oreja derecha", expuso el Ministerio Fiscal en su informe.

Pese a que el segundo agredido encontró el trozo que le había sido amputado por el bocado, dijo que "los médicos no pudieron trasplantársela".

Las peleas entre Abderrahmane y Joop eran tan frecuentes que la dueña del bar, le había prohibido el acceso. Durante la vista oral, declaró que aquella noche "vio al acusado pasar por fuera del bar con su coche mirando a ver si veía a Joop, que eso lo hacía casi cada día, pero siempre se quedaba fuera del local" y que, entonces, "fue directamente a por él, se miraron a los ojos y el acusado empezó la pelea".

Por ambos ataques, Abderrahmane ha sido condenado como autor responsable de una falta de lesiones y de un delito de lesiones. Por el primero deberá abonar 360 euros; mientras que por el segundo deberá cumplir cinco años de cárcel. Asimismo, deberá indemnizar a Vasko en casi 16.000 euros por el perjuicio estético que le ha provocado el ataque así como por el tiempo que tardó en curar sus lesiones.