"Por el Ayuntamiento de Arrecife se ha solicitado licencia municipal para la apertura de Casa Consistorial-oficinas administrativas con emplazamiento en la avenida Vargas número 1". El anuncio recogido esta semana en el Boletín Oficial de la Provincia no prevé la apertura de un nuevo ayuntamiento para la capital lanzaroteña, sino que pretende regularizar la situación administrativa de un edificio que se inauguró oficialmente el 29 de noviembre de 1993 por el entonces alcalde, José María Espino, y el ministro para las Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra.

"Después de casi 20 años hemos decidido que había que regularizar la situación de las instalaciones municipales, aunque estoy convencido de que son muchos los ayuntamientos que se encuentran en la misma situación", aseguró ayer el alcalde de Arrecife, Cándido Reguera.

No obstante, desde el Ayuntamiento de Arrecife se quiso quitar importancia a este asunto. "Es cuestión de papeles", dijo el alcalde, quien negó que los edificios municipales no cumplieran con las medidas de seguridad que exige la ley.

La decisión del Ayuntamiento de legalizar sus edificios municipales se adoptó tras estallar el escándalo del caso Unión cuando el que fuera alcalde en ese momento, Enrique Pérez Parrilla, fuera imputado por presunta prevaricación administrativa tras permitir la apertura del teatro insular sin contar con licencia de apertura. La imputación del alcalde disparó todas las alarmas en el consistorio al comprobar que ninguna de las instalaciones municipales tenían las licencias de apertura en regla.

El Castillo de San Gabriel, que acogerá el Museo de Historia de Arrecife, la futura escuela infantil y las naves municipales también tramitaron al final de la pasada legislatura los papeles para contar con las licencias de apertura. Según el Ayuntamiento ya no existe ningún edificio municipal sin iniciar este trámite.