Un fallo técnico detectado por el comandante del vuelo FR2002 de Ryanair cuando realizaba el pasado domingo el trayecto entre Santiago de Compostela y Lanzarote con 173 pasajeros a bordo, obligó a activar un dispositivo de emergencia en el aeropuerto de Guacimeta como medida de precaución, aunque finalmente el mismo no tuvo que ser desplegado porque el aterrizaje del aparato y el desembarco de los viajeros se realizó "con normalidad", informó Daniel de Carvalho, portavoz de la aerolínea.

Al parecer, según indicó Carvalho, el piloto se percató cuando estaba cerca de Lanzarote de una posible incidencia "en uno de los flaps del avión [dispositivos que están en las alas y se despliegan para el aterrizaje y el despegue], por lo que decidió dar aviso al control de tráfico aéreo con el fin de que activara un operativo de emergencia que no tuvo que ser utilizado".

El aterrizaje se produjo a las 18.53 horas, pese a que la hora prevista inicialmente de llegada a Guacimeta era las 13.40. Se da la circunstancia de que el avión que en primer término debía trasladar al pasaje desde Santiago hasta la Isla y cuya hora programada de salida era las 11.55 horas, también sufrió una avería, que no fue precisada por el portavoz de la compañía.

Como el arreglo de la misma se prolongaría varias horas más de lo previsto, Ryanair optó por habilitar otro aparato en el que acomodar a sus clientes en Santiago, el cual también fue objeto de otro incidente técnico durante la travesía que no impidió continuar hasta Guacimeta.