El exalcalde de Yaiza José Francisco Reyes, volvió ayer al Juzgado de Primera Instancia número 2 de Arrecife por las investigaciones abiertas por los presuntos delitos penales en la concesión de licencias ilegales a establecimientos turísticos de Playa Blanca. Reyes está imputado por cohecho, blanqueo de capitales, prevaricación urbanística, malversación de caudales públicos y asociación ilícita.

El juzgado cuenta desde el pasado mes de junio con un informe que la Unidad de Delitos Económicos y Fiscales de la Policía Nacional (Udef) remitió el pasado mes de junio al Juzgado en el que se da cuenta de las operaciones económicas realizadas por Reyes y su familia en los últimos años. Según el informe recogido por Acn, el exalcalde de Yaiza adquirió una finca de 1.000 metros cuadrados con 120.000 euros en efectivo, así como otras compras por más de 180.000 euros sin que aparezcan apuntes relacionados con esos pagos en su cuenta.

También estaba llamado a declarar ayer el empresario José Rafael Mesa Ferrer, uno de los promotores de un complejo de bungalós en Playa Blanca y cuya licencia, concedida por Reyes, fue anulada por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias.