La avería mecánica de la patrullera Cabaleiro que impedía supuestamente su perfecta maniobrabilidad y la decisión del patrón de la patera de abandonar el timón de la barquilla para no ser identificado podrían ser las causas principales que motivaron la colisión entre estas dos embarcaciones a media milla de la playa de El Jablillo de Costa Teguise.

El secretario general de la Unión de Guardias Civiles en Canarias, Ismael Pineda, defendió ayer la labor desarrollada por los miembros de la tripulación de la patrullera durante el operativo de búsqueda y rescate de la patera aunque reconoció que "se alinearon una serie de astros" para que se produjera el fatal accidente.

Según la Unión de Guardias Civiles la patrullera salió de la base de Corralejo en Fuerteventura en perfectas condiciones técnicas en búsqueda de la patera tras ser interceptada por los radares del Servicio Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) aunque durante el trayecto se detectó una pequeña avería que aconsejó regresar a puerto mientras se pedía el apoyo de la embarcación Al Naif de Salvamento Marítimo ubicada en Puerto Naos en Arrecife. "Los agentes activaron el protocolo correcto y se comunicó el fallo mecánico al puesto de mando", señala Pineda.

Sin embargo, durante el regreso de la patrullera se toparon con la patera a media milla del litoral de Costa Teguise. "En ese momento se decidió interceptar a la patera para evitar que se acercara a la costa y pudiera chocar contra las rocas a la espera del apoyo de Salvamar", destaca Pineda.

La versión de la Unión de Guardias Civiles sobre el choque se debió a que el patrón de la patera dejó la caña de la embarcación por temor a ser identificado ya que el Código Penal castiga con penas de cárcel los delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros por promover la inmigración clandestina. "En ese instante el patrón puso rumbo a colisión lo que provocó el choque entre ambas embarcaciones al no poder maniobrar correctamente la patrullera por la avería mecánica", señala Pineda.