AENA retira en el aeropuerto, por motivos de seguridad, a los pasajeros que abandonan Lanzarote 500 kilos de rocas volcánicas cada semana, entre las que se incluyen también las que se dejan los turistas en los coches de alquiler, así como las depositadas diariamente en los dos contenedores con capacidad de 120 litros ubicados en la Terminal 1. El Cabildo colabora con AENA en la campaña de sensibilizacion contra este expolio y devolverá el material rocoso a su entorno.