El presidente de la República de Uruguay, Tabaré Vázquez, destacó ayer en Montevideo, durante la recepción ofrecida al alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort y al cronista de este municipio, Francisco Delgado dentro de los actos programados por el sexto centenario de la fundación de la villa de Teguise, el papel que jugaron los inmigrantes lanzaroteños y los canarios en su conjunto en la construcción de su país. La unión con Uruguay o data de los primeros años de la fundación de Montevideo, pues en el buque Nuestra Señora de Encina, que partió de Tenerife el 21 de agosto de 1726, se encontraban familias de Teguise.

La delegación lanzaroteña ha viajado hasta Uruguay para homenajear al médico Alfonso Spínola Vega (1845-1905) que emigró desde Teguise a Montevideo en el año 1878. Spínola está considerado como uno de los médicos más notables de ese país no solo por su "actuación heroica" para erradicar la epidemia de viruela (1881-1882) en las ciudades de San José y Las Piedras sino también por su altruismo con los más desfavorecidos. Su contacto con el sabio francés Louis Pasteur fue inspirador del primer Laboratorio Microbiológico Antirrábico de Uruguay. También ejerció la docencia como profesor de historia natural e idiomas del Centro de Instrucción de San José.

Durante la visita oficial, Oswaldo Betancort trasladó al presidente uruguayo las acciones que se están llevando a cabo en Teguise para recuperar y hacer que perdure por siempre su historia, a través de figuras relevantes como la de Alfonso Spínola. Asimismo, recordaron el estrecho vínculo entre ambos pueblos durante la época migratoria de finales del siglo XVIII, principios del siglo XIX, en el que llegaron a ese país 12.500 personas procedentes de Canarias. "Ha quedado de manifiesto el interés y el cariño por parte de las autoridades de Uruguay y el fuerte de hilo de unión entre Teguise y la República", declara el alcalde.

Betancort visitó en la capital uruguaya el palacio episcopal, donde fue recibido por el arzobispo de Montevideo, el cardenal Daniel Sturla, con quien conversó sobre la figura del primer obispo uruguayo, Jacinto Vera Durán, que era de origen canario y nació, en 1813, en un barco cuando sus padres emigraban desde Tinajo (Lanzarote) a Brasil, como etapa previa a Uruguay.

La agenda de la delegación conejera incluyó también la reunión con el embajador de España, Javier Sangro y a visita a la Facultad de Medicina. En el país austral, Spínola alcanzó tal fama como profesional sanitario que la Facultad de Medicina de la Universidad de la República instaló en 1954, a la entrada de su aula magna, un busto de bronce en su recuerdo.

En la ciudad de Las Piedras (la primera en la que se estableció Spínola, en 1878, y donde fue ejemplar su actuación como médico en la epidemia de viruela de 1881) tuvo lugar también un encuentro con el alcalde de esa localidad, Gustavo González y una visita al hospital que lleva el nombre del médico teguiseño. La jornada concluía con el hermanamiento entre Teguise y Las Piedras.