La Geria se convirtió ayer en una fiesta con la celebración de la vendimia tradicional en la que se recrea esa labor agrícola de décadas atrás cuando se utilizaba el camello para transportar las uvas desde las parras hasta el lagar y se pisaban para extraer el mosto que contienen y elaborar el vino. Esas labores artesanales se realizaron un año más en Bodegas La Geria en colaboración con el Ayuntamiento de Yaiza y dentro de los festejos de La Caridad.

La jornada, en la que participaron locales y turistas, rindió homenaje al sector vitivinícola. En este momento, bodegueros y viticultores están inmersos en plena campaña de recogida de uva, que este año comenzó el 2 de agosto, con un retraso de unas dos semanas con respecto a la anterior recolección, debido a la maduración tardía del fruto por las escasas horas de sol. La cantidad que se espera recoger, a priori, ronda los tres millones de kilos, casi como en 2017.

Además de tardía, la vendimia, que ahora recolecta la variedad de malvasía volcánica, se está convirtiendo en "compleja", tal y como la calificó ayer el propietario de Bodegas Vega de Yuco, Rafael Espino. Los chubascos del 4 y 13 de agosto pasados y "la probabilidad de lluvia para este viernes y sábado", avanzó Espino, "acentúan el problema de la pudrición de la uva, por lo cual tenemos que vendimiar a tope". Explicó que "preferimos recoger la uva en peores condiciones de maduración, pero no jugarnos que el viticultor pierda su cosecha".

En caso de que "la lluvia sea abundante, en menos de diez días se va toda la malvasía, por lo que hemos acelerado la vendimia y nos estamos adaptando a las condiciones climáticas que tenemos", detalló el bodeguero.

A lo anterior se une el hecho de que "en la misma parra hay dos o tres brotaciones de uva y puede haber frutos que están en doce grados y otros en diez y además, el tamaño de la uva es pequeño y se madura más rápido. Muchos racimos al principio, lo que ocurre en la mayor parte", continuó Espino, "se quedaron pequeños. También puede ocurrir que a nivel de aroma la uva esté madura pero a nivel de azúcar no. Desde luego que será un año para recordar".

Por su parte, el gerente de Bodegas La Geria, Ramón Melián, afirmó que "la humedad que ha habido, más la lluvia degeneran en pudrición". En su caso estiman recoger menos uva de la prevista. "Del medio millón de kilos de todas las variedades, nos quedaremos en unos 450.000 kilos", manifestó.

Jorge Rodríguez, técnico de campo de Bodegas El Grifo, se refirió a la humedad y la lluvia como "caldo de cultivo para los hongos". El Grifo lleva recogidos unos 300.000 kilos de malvasía y espera terminar de recepcionar esa variedad, "hasta los 650.000 o 700.000 kilos, un 10% o 15% más", a principios de la próxima semana. Ya vendimiaron por la zona de Masdache (Tías), continuarán por la costa de Tinajo, el norte de la Isla y La Vegueta (Tinajo).

El gerente de Bodegas Los Bermejos, Ignacio Valdera, también considera que "la lluvia en esta época no es nada buena porque el agua con calor lleva al desarrollo de hongos y lo más probable es que le afecte a la uva negra, la diego y la moscatel, las que más tarde se recogerán. En principio, la malvasía sigue su rumbo y madura poco a poco". La recibe de fincas de Tinajo, Masdache, Montaña Blanca y La Geria, entre otras localidades.

El presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de Lanzarote, Rafael Morales, indicó que "la previsión de unos tres millones de de kilos, por ahora, se mantiene" y confía en que "la lluvia no afecte tanto al estado de la uva, aunque en todo caso lo podría hacer con la moscatel, que se recoge más tarde".

En cuanto al precio la expectativa es "mantener los mismos que el pasado año, por lo que la malvasía de primera calidad se pagará a 1,90 y dos euros, y algo menos la negra, variedad que tiene menos salida en el mercado".

Mientras el trabajo seguía ayer en los campos de viñedos "a marcha forzada", La Geria exhibía sus encantos ante los objetivos de fotógrafos alemanes y de la revista National Geographic y, además, se realizaban las fotos para promocionar la edición de la Wine Run (Carrera del Vino) del año que viene, aseguró el concejal de Medio Ambiente de Yaiza, Marcial Viñoly, una de las citas deportivas más esperadas por los corredores.

"Con actividades como las de hoy se trata de que la gente vea nuestras tradiciones en un lugar único en el mundo como es La Geria porque lo que hay aquí no está en ningún otro sitio", destacó el edil.

Viñoly era ayer uno de los que guiaba a los camellos 'Careto' y 'Andrés', habituales en las Montañas del Fuego, en el recorrido entre la explanada de Bodegas La Geria y las fincas con las vides por las pequeñas veredas entre los zocos.

Los animales se convirtieron entre lo más fotografiado del día, en un evento que cada año llama más la atención de vecinos y turistas.

La misa en la ermita de La Caridad, con la participación de la Coral de Yaiza, y la actuacón de la Agrupación Folclórica Rubicón, clausuraron las fiestas de este año.