La Bocaina, el buque escuela más grande de España para prácticas de pesca y navegación, ha vuelto a la mar después de dos años en el dique seco debido a los trabajos de revisión y reparación al que ha sido sometido en un astillero de Las Palmas de Gran Canaria.
El pasado 26 de febrero el barco regresó a su base en Puerto Naos, en Arrecife, situada a pocos metros del Instituto de Formación Profesional Marítimo-Pesquero de Canarias, más conocido como Escuela de Pesca, un centro referente no solo en el Archipiélago sino también en todo el territorio nacional, adscrito a la Viceconsejería de Pesca de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias.
Esta embarcación de la Viceconsejería de Pesca tiene treinta metros de eslora, 750 caballos de potencia y está en Arrecife desde abril de 1991 tras su construcción en el astillero de Rodman, en Vigo (Galicia), explicó el director de la Escuela de Pesca, Javier Fraile. Añadió que se diseñó como un pesquero polivante y que el proyecto inicial se modificó para hacer una sala de máquinas más amplia destinada a dar cabida a los alumnos, se habilitó un aula de formación para los estudiantes y se amplió el número de camarotes para los aprendices reduciendo el espacio de la bodega para el almacenamiento del pescado. La Bocaina dispone de tres cubiertas y veinte camas.
En sus instalaciones se puede practicar la pesca polivante, ya que cuenta con todo tipo de artes, y también sirve para realizar cualquier práctica de navegación. Presta servicio, entre otras, para prácticas de máquinas, puente, marineros, supervivencia en la mar, pesca y buceo. El hecho de que la escuela cuente con este barco insignia, convierte a ese instituto en un atractivo para muchos estudiantes que eligen Lanzarote para realizar su formación a bordo del buque.
Aunque en un principio La Bocaina se desplazó a Gran Canaria para una revisión periódica, durante el proceso se detectó la necesidad de realizar otras intervenciones como las reparaciones de la obra viva (superficie sumergida del barco), la cubierta del servo-timón y la vía de agua en el túnel de la hélice, trabajos que se realizaron en el astillero Repnaval. El coste ha ascendido a 297.948,38 euros, informó la Viceconsejería de Pesca.
El director general de Pesca, Orlando Umpiérrez, indicó que la permanencia del buque durante dos años en el astillero se debió a que hubo que tramitar un concurso público para adjudicar las nuevas reparaciones, a raíz de que se descubriera la necesidad de llevar a cabo intervenciones de mayor alcance que las inicialmente previstas, lo que ha retrasado la puesta a punto de La Bocaina.
Durante ese tiempo la formación se ha hecho en otros barcos.
Campañas científicas
Durante años La Bocaina se ha dedicado a hacer prácticas científicas por todas las Islas y en la zona del Banco de la Concepción, a unos 75 kilómetros al norte de Lanzarote. También se ha utilizado para hacer ejercicios de un día en el litoral de Lanzarote.
La tripulación la integran el capitán, Carlos de Quintana, el jefe de máquinas, Pablo Rodríguez, tres marineros y un contramaestre.
La Escuela de Pesca forma a unos 700 alumnos al año, de los que 220 pertenecen a los ciclos formativos de grado medio y superior de las enseñanzas regladas y los restantes, a cursos profesionales de estudios no reglados.
