La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Lanzarote, los pactos de la desconfianza

CC y PSOE necesitan el apoyo de los consejeros del PP para gobernar en el Cabildo l Los populares piden garantías para blindar a Astrid Pérez en la alcaldía de Arrecife

Dolores Corujo celebra la victoria en la noche electoral. LAVOZDELANZAROTE.COM

La historia política de Lanzarote está repleta de traiciones. Así que cuando hay que firmar un pacto de gobierno lo normal es que empiecen a florecer los fantasmas del pasado. Llegó un momento en que incluso se acudía a la figura de un notario para dar fe de que lo que se estaba firmando se iba a cumplir durante los cuatro años del mandato. Los socialistas fueron los primeros que aprendieron que en la isla podía suceder cualquier cosa si por allí estaba el presidente del PIL, Dimas Martín, un auténtico muñidor de la política. De hecho su asalto a la alcaldía de Teguise en 1982 se produjo cuando logró el respaldo de un concejal del PSOE que pasó a ser oficialmente uno de los primeros tránsfugas de Lanzarote.

El tablero político de Lanzarote tras las elecciones del pasado 26 de mayo sitúan al PP como el árbitro de un posible pacto tanto en el Cabildo como en el Ayuntamiento de Arrecife. La desaparición de partidos como Ciudadanos, PIL y Somos en el Cabildo y el empate a consejeros entre PSOE y CC ha situado a los populares en una situación más que aventajada para decantar la balanza hacia uno u otro lado.

En Arrecife, el PP también es clave a pesar de que CC fue con diferencia la lista más votada. Sin embargo, los números y la situación en el Cabildo permite a la cabeza de lista de los populares y presidenta insular de este partido, Astrid Pérez estar en una situación privilegiada para ser la nueva alcaldesa de la capital. A estas alturas de las negociaciones, el PP insiste en que la alcaldía es innegociable tanto si pacta con CC como con los socialistas.

Cuando todo parecía que PP y CC estaban llamados a entenderse (en el anterior mandato se aliaron en el Cabildo y promovieron una moción de censura, sin éxito, contra la alcaldesa socialista, Eva de Anta) y dado que tenían los números tras las elecciones de mayo para pactar en Arrecife y el Cabildo, a medida que pasaban los días la sintonía inicial comenzaba a desvanecerse.

¿Y por qué no se firmado hasta ahora ningún el acuerdo? La desconfianza. Astrid Pérez, que las ha visto de todos los colores en Lanzarote, no se olvida que CC y PSOE ya se han aliado para evitar que el PP gobernara tanto Arrecife como el Cabildo. En 2005 el por entonces presidente del Cabildo, Francisco Cabrera (PP) se vio obligado a dimitir cuando comprobó que socialistas y nacionalistas (estos últimos socios de gobierno) le estaban haciendo la cama para presentarle una censura. Situación prácticamente idéntica que se produjo en 2012 cuando el alcalde Cándido Reguera (PP) presentaba la dimisión al ser consciente de que CC y PSOE volvían a jugársela al PP. En esa ocasión eran los socialistas los que estaban sosteniendo un pacto que terminaba rompiéndose prácticamente a un año de las elecciones de 2011.

Con estos antecedentes, el PP sabe que no se puede fiar ni de CC ni PSOE. Por eso la obsesión de los populares es firmar el pacto que pueda garantizarle la alcaldía de Arrecife durante los cuatro años de mandato. "Queremos garantías", repiten y una otra vez los negociadores del PP sabiendo que en Arrecife con seis concejales están expuestos a cualquier inestabilidad política. Y es que los votos del PSOE (cinco) no son suficientes para la mayoría lo que implica el apoyo de dos ediles más, en este caso los de Nueva Canarias, que aparece abierta a esta opción.

Y una de esas garantías está en la presidencia del Cabildo. La tesis del PP es que el apoyo a la socialista Dolores Corujo deja abierta la moción de censura junto a CC en caso de que se tuerzan las relaciones en Arrecife con el PSOE. En cambio la firma de una censura junto a CC para dar la presidencia a Pedro San Ginés blindaría a los nacionalistas durante todo el mandato, dado que la Ley de Cabildos impide que un mismo consejero pueda firmar más de una censura. Ese blindaje desprotegería en teoría a Astrid Pérez que al igual que en el pasado su partido podría salir del Ayuntamiento por la puerta de atrás.

Compartir el artículo

stats