Una capa de tierra envolvió ayer a las islas de Lanzarote y La Graciosa, que por momentos, fue insoportable por las rachas de viento que en algunos casos alcanzaron los 90 kilómetros por hora. Una densa calima, sobre todo, a partir del mediodía, obligó a desviar tres vuelos que pretendían aterrizar en Lanzarote.

Los vuelos que tuvieron que ser desviados a otras islas fueron uno de Vueling procedente de Barcelona y otro de Ryanair que partió de Reino Unido, y que finalmente aterrizaron en Fuerteventura. Ambos vuelos pudieron regresar a Lanzarote dado que la calima fue remitiendo por la tarde. Otro vuelo interinsular procedente de Tenerife Norte tuvo que regresar a esa isla ante la imposibilidad de hacerlo en el aeropuerto César Manrique. No obstante, el aeródromo pudo seguir funcionando con relativa normalidad con los vuelos nacionales e internacionales.

El mal tiempo provocó también la suspensión de la prueba deportiva Desafío 8º Isla, que se iba a desarrollar en La Graciosa. Y es que la octava isla amanecía con un fuerte viento, imposibilitando la instalación de buena parte de la infraestructura necesaria para la celebración de la prueba. Además, el Servicio Insular de Deportes comprobó que los caminos por los que debía transcurrir los segmentos de bicicleta y carrera a pie estaban intransitables. Atendiendo a las medidas de seguridad necesarias y para evitar el desplazamiento masivo de los participantes, la organización cancelaba la prueba en su totalidad a primera hora de la mañana. Muchos de los inscritos ya se encontraban en los barcos que partían desde el muelle de Órzola.

En principio la novena edición del Desafío 8º Isla no se trasladará a una nueva fecha, y será en el año 2021 cuando vuelva a celebrarse. Todos los participantes de esta edición tendrán reservada su plaza y se les dará prioridad en las nuevas inscripciones.

Entre las intervenciones de los bomberos destaca la realizada a las 13.30 horas, cuando tuvieron que desplazarse a Caleta Caballo ante el aviso de que una pérgola de madera estaba a punto de levantarse.

Ante las previsiones de alerta naranja por fuertes vientos prevista para anoche, la alcaldesa de Arrecife, Astrid Pérez, emitía un decreto por el que se suspendían, a partir de las doce de la noche, todas las actividades recreativas, lúdicas y deportivas al aire libre.

De esta manera, el carnaval de Arrecife se quedaba anoche sin la verbena en el área de El Almacén. Asimismo, el concurso de disfraces infantil, previsto para hoy domingo a las 17.00 horas, también se cancela. No obstante, el Carnaval Porteño de Arrecife, con el desfile de batucadas y comparsas, y el Carnaval de Día pudieron celebrarse sin ningún tipo de incidencia, al igual que el concierto de Café Quijano que se adelantó a las 20.00 horas.

En Teguise también se ha cancelado el tradicional mercadillo que se celebra todos los domingos en las calles del casco histórico y al igual que en el resto de los municipios se ha decretado el cierre de todas las instalaciones deportivas, culturales y de ocio municipales exteriores.