La asociación de trabajadores penitenciarios Tu abandono me puede matar ha advertido este jueves a través de un comunicado que "la tensión va en aumento" en el centro penitenciario de Tahíche y que las medidas que ha adoptado la dirección de esas instalaciones contra la propagación del Covid-19 "están poniendo en grave riesgo tanto a internos como a funcionarios".

Según el colectivo, desde hace unos días se permite que internos que se encuentran en cuarentena sanitaria hagan uso de espacios y zonas comunes del módulo en el que residen sin un protocolo sanitario adecuado para tal fin. Fuentes de la asociación explican que se trata del Módulo 1, en el que están los nuevos ingresos o los presos que son trasladados hasta el Hospital Doctor José Molina Orosa y que regresan a la prisión tras haber mantenido contacto con el exterior.

Los funcionarios denuncian que "la dirección del centro y los servicios médicos están actuando con improvisación y temeridad, teniendo que ser los propios funcionarios los que van creando protocolos, ante la falta de ellos, para salvaguardar la salud del resto de internos que conviven habitualmente en ese módulo".

La asociación vuelve a alzar la voz "para dar a conocer las condiciones de precariedad en las que se trabaja debido a la falta de medios y personal, ya que somos testigos y víctimas de la inacción por parte de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias para solventar dicha problemática con la connivencia de la dirección del centro".

El pasado 15 de marzo la asociación y el sindicato Acaip informaron sobre un motín producido en el Módulo 3 de Tahíche después de que varios presos se quejaran de que mientras a los trabajadores penitenciarios se les permite el acceso desde el exterior de la prisión, a los familiares de los presos se les impide acceder a la cárcel a visitarlos. Las visitas han sido suspendidas a raíz del Real Decreto 463/20 que restringe el movimiento de personas como una de las medidas para frenar el coronavirus. Los presos se quejaron también de que los funcionarios no lleven guantes ni mascarillas, "por lo que pueden ser transmisores del Covid-19".