El vertedero de Zonzamas tiene de vida útil hasta el año 2030, por lo que hasta esa fecha el Cabildo podrá seguir enterrando en las dos nuevas celdas que, en principio, se construirán en las laderas del complejo ambiental las basuras no recuperables que sean rechazadas en la planta de clasificación. Se trata de los desperdicios urbanos que "llegan sin separar en las bolsas y que carecen de la calidad para recuperarlos, por lo que la materia inerte hay que depositarla en las celdas de vertidos, las cuales se sellarán a medida que las mismas se vayan llenando", explicó el Director Insular de Residuos, José Juan Lorenzo.

En los próximos días, la Corporación insular presentará el estudio que ha elaborado Prointec y en el que se planifican las actuaciones a desarrollar en Zonzamas en las próximas dos décadas. La primera fase del año 2011 hasta 2012 requiere 1,2 millones de euros.