El operativo policial integrado por diversas fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado ha efectuado durante la noche de ayer viernes y la madrugada de este sábado cerca de 200 sanciones en Lanzarote por incumplimiento de las medidas establecidas para la prevención de la COVID-19.

La gran mayoría de estas sanciones se han realizado en diversos barrios de Arrecife, como San Francisco Javier, Argana Alta, la zona del Charco y La Marina, haciendo incidencia en zonas susceptibles de reuniones por botellones y bares.

Las infracciones denunciadas son, fundamentalmente, actas contra la salud pública de personas y establecimientos que incumplen la normativa sanitaria.

Desde esta madrugada, Lanzarote y La Graciosa se encuentran en el nivel máximo de alerta sanitaria, el nivel 4, debido al aumento de casos positivos por coronavirus y al alto número de pacientes hospitalizados.

Ante esta delicada situación, la presidenta del Cabildo, María Dolores Corujo, ha anunciado que cerca de cuarenta efectivos de la UME, militares del Ejército de Tierra y agentes de la Policía Autonómica ya se encuentran trabajando en Lanzarote para reforzar así el dispositivo de seguridad y vigilancia establecido. Estos profesionales trabajarán de forma coordinada con el Consorcio de Seguridad y Emergencias de Lanzarote hasta mediados del próximo mes de febrero.

La presidenta insular insistió en que seguirán luchando, con todos los medios al alcance, para hacer frente a esta pandemia y, según aseguró, "entre todos, y con responsabilidad, lograremos doblegar la curva de contagios".

De este modo, y durante todos los fines de semana, el refuerzo del operativo de inspección, vigilancia y desinfección de los espacios públicos consistirá en la incorporación de 15 efectivos más de la UME, que trabajarán en la desinfección de hospitales, el centro penitenciario y la zona del auto Covid; 14 militares del Ejército de Tierra, cuyas labores serán la desinfección de todos los centros de salud con nebulización interior, y 6 efectivos de la Policía Autonómica, que llevan a cabo las labores de inspección en las zonas más concurridas como son Arrecife, Playa Honda y Tías.

Por su lado, la Policía Canaria ha colaborado con la Policía Local de Arrecife en una obra abandonada donde se producen reuniones de personas. Se realizaron siete actas por no llevar mascarilla y una por tenencia de sustancias estupefacientes. También en Lanzarote, se desalojó un gimnasio donde se realizaba clase de crofit y otra clase de zumba con 28 personas. La Policía Canaria recuerda la necesidad de mantener las pautas de seguridad y prevención frente a la COVID-19., actualizadas este 22 de enero tras pasar las islas de Lanzarote y La Graciosa a nivel 4.

“No se puede esperar ni un día más”

Migdalia Machín, secretaria insular de Coalición Canaria, afirma que “ni Lanzarote ni La Graciosa pueden esperar ni un día más por un plan de medidas económicas que palie los efectos derivados de la pandemia”. Tras entrar en el nivel 4 de alerta sanitaria, Machín resalta que “los anuncios de ayudas a los sectores más afectados hecha por el Gobierno de Canarias y el Cabildo de Lanzarote no sirven de nada si no llegan a quienes lo necesitan” A su juicio, ha habido tiempo más que suficiente para impulsar medidas; pero más de diez meses después del primer confinamiento se sigue sin materializar nada. “Es increíble que en Lanzarote aún no haya terminado el procedimiento. Han abandonando a su suerte a nuestro principal motor económico, el sector turístico, y a todos los sectores y subsectores”, afirmó. | LP