Operarios del Servicio de Conservación de Carreteras y técnicos del área de Obras Públicas del Cabildo de Lanzarote continuaron trabajando durante toda la mañana de ayer para limpiar y acondicionar la carretera LZ-10 -que conduce desde Los Vales a Haría- en el tramo conocido como Malpaso, después de que las últimas lluvias provocaran el desprendimiento de piedras de diversa consideración.

Los desprendimientos hacían peligroso la habitual circulación de vehículos por esta carretera del norte de Lanzarote, por lo que fue cerrada para evitar que se produjeran accidentes en la vía.

Rapidez con las obras

Según se informa desde el Cabildo de Lanzarote, gracias a la celeridad con la que se han llevado a cabo estos trabajos, se ha podido reabrir al tráfico rodado esta vía del municipio norteño, recobrando así la normalidad en el tráfico rodado..

Asimismo, desde el Cabildo señalan que no es la primera vez que ocurren desprendimientos en esta carretera, por lo que el próximo martes un equipo de geólogos valorará el actual estado de la vía para intervenir y acondicionar definitivamente esta carretera y se pueda garantizar de esta manera la seguridad de los conductores que la utilizan.