Las fiestas patronales de San Ginés cerraron ayer su programación oficial -aún quedan actos fuera del programa- en una edición que ha vuelto a estar marcada por las restricciones por el covid-19 y sus efectos directos tanto en el número de actividades como en el de asistentes permitidos. No obstante, pese a que solo han sido seis días para honrar al patrón de la capital de Lanzarote -20 al 25 de agosto- la voluntad de ofrecer ocio, cultura y diversión para los menores y jóvenes, ha llevado a buen puerto unos sangineles exprés que despidieron al santo hasta el próximo año con la esperanza de verlo en su trono de procesión en las calles de Arrecife.
Si en la víspera de la festividad de San Gines se celebró un festival folclórico con las actuaciones de varios grupos, anoche en el mimos escenario -la sala Teatro de los multicines Atlántida- acogieron un tributo musical a la fallecida cantante Chavela Vargas.
Participaron en el festival folclórico Ciudad de Arrecife del martes por la noche la agrupación folclórica Los Campesinos, Coros y Danzas de Arrecife y la parranda marinera Los Buches, en un acto al que acudió un nutrido grupo de asistentes y que fue presentado por Francisco José Navarro. Tanto la alcaldesa como el concejal de Festejos destacaron el deseo de mantener las tradiciones de la ciudad y recuperar otras cuando sea posible sin las restricciones que impone la pandemia de covid-19.
Al mediodía no faltó la celebración de la misa en la iglesia de San Ginés, también con un aforo de algo más de 100 personas y que tuvo otro acto por la tarde, a las 19.30 horas, con una misa en homenaje a San Ginés. Este año, como en el anterior, no hubo procesión por las calles de la capital y hoy, a las 19.30 horas, habrá otra misa por los fallecidos en la parroquia.
Por la mañana hubo deporte, con la tradicional travesía a nado, la regata de vela latina o el torneo de bola canaria de madera. Los talleres infantiles y juveniles, la proyección de dos películas y el concierto tributo a Chavela Vargas ocuparon el resto del día.
El legado de Agustín de la Hoz
Fuera del programa de actos, pero muy ligada a la cultura de Arrecife, fue la presentación de libro Agustín de la Hoz, un volcán humano, en la Casa de la Cultura que lleva su nombre en Arrecife.
Se trata de una obra esperada e imprescindible, que camina entre el ensayo histórico y la biografía de una de las plumas más brillantes que ha dado la isla. Entre sus páginas se adivina el trazo respetuoso del autor, Benchomo Guadalupe, que ha hecho gala de una gran objetividad en los textos y temas que aborda, concediéndose escasas licencias personales dotadas de un cierto aire poético, pues en este caso el investigador siempre ha estado enamorado del caudal literario del investigado.
Al acto acudieron la viuda de Agustín de la Hoz, Pilar Perdomo, y su hija Nereida de la Hoz.
