Bodegas Vega de Yuco celebró el pasado fin de semana su 25 aniversario con un evento en Finca Testeina, en Masdache (La Geria), el último proyecto de enoturismo en el que se embarca ahora la bodega tras estas dos décadas y media. A la celebración acudió el personal que trabaja en las instalaciones.

Coincidiendo con esta fecha señalada, Vega de Yuco presentó su nuevo vino, Princesa Fayna, el primer vino espumoso de la bodega. Un Brut Nature de uva Diego, elaborado por el método tradicional y crianza de 30 meses, con fecha de degüelle de marzo de 2022. El vino conmemorativo del 25 aniversario cuenta con una producción actual limitada de tan solo 600 botellas que se comercializan, por el momento, en el ámbito geográfico de Canarias.

De igual forma, en este acto, los asistentes conocieron dos innovadoras experiencias enoturísticas en las que está trabajando la bodega de cara a la próxima apertura de este emblemático lugar en el espacio Protegido de La Geria.

Nuevas instalaciones de Finca Testeina en Masdache (Tías), en La Geria. Siboney Tabares King

Una visita y recorrido autoguiado con realidad aumentada, a través de una aplicación móvil por los más de diez puntos de interpretación que se han desarrollado alrededor de la casa histórica, viñedos y volcán de Testeina, y una experiencia pionera en Canarias de maridaje musical y cata sinestésica (Wine Rhapsodies 360º) para este exclusivo, elegante y moderno vino espumoso de Lanzarote, fueron algunas de las experiencias que completaron el programa del 25 aniversario y que la bodega pretende compartir próximamente con todos los visitantes de su nuevo proyecto. La obra musical Princesa Fayna fue presentada por su creador, el músico y compositor canario y precursor de esta experiencia en España Samuel Miranda.

El evento estuvo maridado con un catering especial, elaborado por el reconocido chef norteño Nauzet Santana, del Restaurante Puerto Bahía del Varadero de Puerto del Carmen.

25 años elaborando vinos icono en Canarias

Durante el evento, la bodega realizó también un breve recorrido por su trayectoria y antecedentes. 25 años marcados por varios hitos relevantes en su andadura desde el 23 de abril de 1997, fecha en la que se constituyó como Bodega en un pequeño almacén de La Vegueta (Tinajo), concretamente en la zona del Maretón de Yuco, que le dio su nombre.

De La Vegueta se trasladó a los tres años al Complejo Agroindustrial de Teguise, primero a las dependencias de la bodega del complejo y después a la antigua fábrica de batatas fritas, donde permaneció hasta el año 2001, cuando se instaló definitivamente en su actual ubicación, el Lomo de Tese, en Masdache.

Algunos de los asistentes al 25 aniversario de Vega de Yuco. Siboney Tabares King

De la extraordinaria primera vendimia del verano de 1997, nació una pequeña producción del primer vino Vega de Yuco, con sus cuatro referencias (blanco seco, semidulce, rosado y tinto). Un vino que no solo ha conservado la identidad de entonces, sino que tras cinco lustros se ha consolidado en el mercado de Canarias y fuera del Archipiélago por su reconocida calidad.

Ocho vendimias después, en el año 2005, llegó el segundo hito importante para esta bodega, con el nacimiento del reconocido vino Esencia Yaiza. Su inconfundible botella azul, forman parte de la identidad de la bodega y es reconocida, igualmente, fuera de las fronteras del archipiélago como un vino icono de la isla, avalado también por la calidad del mismo.

Botellas hechas cerca de Venecia

La creación de las primeras botellas se realizaron en una fábrica de Ormelle, cerca de Venecia, e inspiradas en los artesanales y afamados cristales azules de las fábricas de Murano.

En sus inicios, no fue fácil adaptar la botella a los sistemas de embotellado y etiquetado existentes. “Tuvimos que cortar los brazos de la máquina de etiquetar para adaptarla a la botella”, recordó Rafael J. Espino Curbelo, propietario y gerente de la bodega. Años después, su fabricación se acercó a Canarias y se trasladó a una fábrica española, donde actualmente se realizan estas singulares y decorativas botellas.

Vino 'Yaiza' de Vega de Yuco en su emblemática botella azul. Siboney Tabares King

Respecto a su etiqueta, ha pasado por varias transformaciones de imagen e identidad visual. Desde la primera que fue diseñada por el propio Rafael, hasta la última actualización de la imagen corporativa de la bodega que tuvo lugar en el año 2018. 

En esta primera década (1997-2017), la bodega trabaja con las cuatro referencias de Vega de Yuco, el blanco Malvasía Volcánica, el rosado y tinto de Listán Negro, y un semiseco entonces Vega de Yuco. Al cambiar la normativa y estándares europeos y tener que aplicar la nueva denominación de “semidulces” a vinos que hasta la fecha habían sido considerados “semisecos”, la bodega opta por adaptarse a las exigencias del mercado y bautizar a su semiseco Vega de Yuco con el nombre de la princesa guanche “Ico”. La primera princesa de la saga de vinos con nombres canarios que nacerían años después.

Rafael Espino (derecha), propietario de Vega de Yuco, en Finca Testeina. Siboney Tabares King

De esta segunda etapa, nacen también, entre otros, los licores. Se elaboraban con productos de la tierra, productos de temporada. “Si había moras, hacíamos licor de moras, si había hierbas, se elaboraban los licores de hierbas… todo con recetas tradicionales y la aportación y buen hacer de nuestro enólogo”, señaló con añoranza Rafael. Una etapa en la que trabajó codo a codo con el que fuera su amigo y enólogo, José Ramón Fernández Romai, apodado como el “Gallego”, a quien la bodega recordará siempre con especial reconocimiento y cariño.

Tras Yuco y Yaiza, en 2010 llega otra joya a la Bodega. +Dach es un juego de letras y símbolos que fonéticamente se traducen en el nombre del pueblo de Masdache, el pago del municipio de Tías donde se ubica la bodega. Un vino de clara influencia Canaria-Portuguesa. Son la representación en la isla de los reconocidos vinos portugueses.

En esta misma década, en 2013, se da otro hito importante. Una edición especial para supersticiosos, 2012+1. El 25 de agosto (festividad de San Ginés) de ese año 2012+1, Lanzarote ya contaba con su primer vino embotellado. Una cosecha que además fue extraordinaria, según las hemerotecas, por su calidad y volumen.

En la última década y etapa actual de la bodega se producen otros hitos importantes. El nacimiento de la línea de vinos ecológicos de la bodega y la línea Premium Princesa Gara del año 2018. Nuevo salto cualitativo de la bodega con estos vinos de guarda y producción limitada. Nuevamente, el reconocimiento de Vega de Yuco a sus orígenes, bautizando a esta nueva línea de vinos con el nombre canario de otra princesa guanche.

Una casa del siglo XVI, nueva sede

Finca Testeina es el proyecto que aúna y engloba todos los valores representados durante estos 25 años por Bodegas Vega de Yuco. La casa pasó a manos de la propiedad de la bodega en 2017. En su apuesta por conservar la herencia de la cultura vitícola, agrícola, cultural y patrimonial de la isla, emprendió el proyecto de recuperación de este espacio.

Finca Testenia no debe ser patrimonio de unos pocos, es un lugar para compartirlo con todos”, afirmó Rafael J. Espino. Las primeras referencias documentadas de la casa datan del siglo XVI, y fue inscrita por primera vez en el registro oficial en el año 1.800.

Experiencia Cata Sinestésica en Vega de Yuco. Siboney Tabares King

El último hito de la bodega llegó el 24 de diciembre de 2021 con la salida al mercado de las primeras 400 botellas de su primer vino espumoso de uva Diego, Princesa Fayna. Un Brut Nature elaborado por el método tradicional (champanoise). El primer degüelle del vino tuvo lugar en noviembre de 2021, con una crianza de 24 meses. En marzo de 2022, se realizó un segundo degüelle con otras 600 botellas con motivo de este 25 aniversario de la bodega, fecha en la que se ha presentado este vino.

Este Brut Nature nace de una pequeña parcela situada en la ladera del Volcán de Juan Bello y nuevamente lleva el nombre guanche de la que fue reina y señora de Lanzarote, Fayna, mujer del Rey Zonzamas y madre de Princesa Ico.

El vino respira modernidad, elegancia y respeto por la viticultura tradicional de Lanzarote, representada en esta uva minoritaria de la isla, como homenaje de la bodega al trabajo de todos los viticultores.