Polémica en La Graciosa por la instalación de nuevas señales de tráfico: “Hay una cada 50 metros”

Los carteles advierten de la presencia de badenes, el uso compartido de los caminos por vehículos y ciclistas y la limitación de la velocidad a 30 kilómetros por hora

Las señales para regular el tráfico llegaron a La Graciosa en julio de 2018. El Ayuntamiento de Teguise instaló ese verano en Caleta del Sebo las señales verticales para ordenar la circulación de vehículos y también colocó carteles informativos direccionales para indicar los puntos de interés de la octava isla canaria, la única del Archipiélago a la que no ha llegado el asfalto.

El Consistorio aseguró entonces que esa intervención respondía “a la demanda de los vecinos dada la realidad del tráfico en la isla y la inseguridad de los viandantes ante la inexistencia de señales que pongan orden al mismo”.

La Guardia Civil de Tráfico tenía registrados hace cuatro años cerca de 300 coches en La Graciosa, cuya superficie es de 28 kilómetros cuadrados.

Ahora han aparecido nuevas señales repartidas junto a los caminos. Los carteles no pasan desapercibidos ya que destacan por su color rojo y además están situados a poca distancia uno de otros. Los mismos alertan de la presencia de badenes y del uso compartido de las vías por vehículos a motor y bicicletas, entre otras indicaciones, como la limitación de la velocidad a 30 kilómetros por hora.

"Impacto ambiental"

La polémica está servida. El vecino Suso Páez se pregunta en sus redes sociales “¿dónde queda ahora el impacto ambiental?”, en referencia a los que en 2018 protestaron por la colocación de la señales al entender que sobresalían en un territorio tan frágil como es La Graciosa, donde cualquier actuación, por pequeña que sea, salta a la vista.

“Ahora medio ambiente ha llenado la isla de señales, una a cada 50 metros”, asegura Páez.

Un internauta comenta al respecto: “Y seguro que hay más señales que coches”.

El nuevo malestar en La Graciosa se suma al que pusieron de relieve hace unos días los residentes, sobre todo, los conductores de los jeep safaris, por la intención de la Demarcación de Costas de Canarias de cerrar el paso de vehículos por la carretera de Playa Lambra al estar dentro del dominio público marítimo terrestre.

Playa Lambra se ubica en el norte de la isla y es uno de los puntos que se recorren en las excursiones en jeep safari, bicicleta o a pie. Se restringen el estacionamiento, la circulación no autorizada de vehículos y la acampañada.