La Coordinadora de Organizaciones Agrícolas y Ganaderas de Canarias (COAG) reclama al Ayuntamiento que legalice la situación de las granjas ganaderas de la capital grancanaria, las cuales se encuentran, en su gran mayoría, fuera de ordenación. En el municipio sobreviven aún, pese a la fuerte presión urbanística que sufren, más de 100 explotaciones de pequeñas dimensiones, que están ubicadas en su gran mayoría en el Guiniguada, Marzagán, Tenoya, San Lorenzo y el corredor rústico que rodea la ciudad.

La mayoría de estas granjas, en las que son explotadas más de 2.000 cabezas de ganado, se encuentran en situación alegal y no cumplen en la actualidad la normativa que se les exige.¶

Rafael Hernández, presidente de la Coag, ha expresado su esperanza de que la creación de una concejalía de Agricultura y Ganadería permita solucionar el problema que padecen estas explotaciones, que reclaman la creación de polígonos que les permita desarrollar su actividad sin molestar a la población que se ha ido asentando en las cercanías de las granjas.¶

"Muchas de estas granjas", explicó, "están en una situación alegal porque la normativa fue cambiando y se les exige normas que no pueden cumplir". Hernández expresó su confianza de que el nuevo gobierno municipal modifique el plan general y los incluya dentro de ordenación. Para la COAG, la "sola creación de la concejalía de Agricultura y Ganadería representa un avance cualitativo importante, porque indica que desde el ayuntamiento se va a prestar una mayor atención que antes a los temas agrícolas".

Otro caballo de batalla de los agricultores es el agua de riego más barata para los cultivos. La COAG lleva años denunciando el escaso volumen de agua depurada que llega a los cultivos. En la estación depuradora de Barranco Seco sólo se depura el 50% de las aguas negras que llegan a la estación. "De ese 50% que se depura", señaló Hernández, "a los agricultores sólo les llega el 20%".¶

AGUA. El representante de la COAG está convencido de que los problemas de depuración se acabarían si se "produjera un agua desalada de mayor calidad. A los agricultores les interesa que la ciudad tenga agua de buena calidad y que se pueda beber agua del grifo, porque eso permitirá depurar más, los electrodomésticos durarían más y los cultivos dispondrían de más y mejor agua". ¶

Hernández pidió también a la concejala de Agricultura, Margarita Torrent, que los restos de podas de los jardines de la ciudad dejen de tirarse en Salto del Negro y sean reciclados como compost para los cultivos agrícolas. "Los restos de poda se están utilizando en Juan Grande para la agricultura. No sé por qué no se hace lo mismo en Salto del Negro.Sólo hace falta una máquina de 300.000 euros. Los agricultores también reclaman más facilidades para los trámites administrativos en las oficinas municipales y una mayor inspección en Mercalaspalmas de los productos de fuera que son vendidos como de la tierra.