En el antiguo Hotel Santa Ana, ubicado en la calle Calvo Sotelo del barrio de Vegueta, viven una serie de inquilinos en régimen de alquiler o propiedad cuando el edificio está calificado exclusivamente como uso hotelero y no como uso residencial.

Actualmente en este inmueble de tres plantas se alquilan y venden las antiguas habitaciones del hotel reformadas como apartamentos cuando no se trata de una parcela habitable. Aunque esto no lo sabían al menos ocho propietarios que compraron algunos de estos apartamentos de buena fe y con escritura de propiedad, quienes no comprobaron si el suelo era o no residencia, según fuentes municipales.

La solución sería cambiar la calificación de la parcela de uso hotelero a residencial, para lo que no se tardará menos de tres años, hasta que entre en vigor el Plan General Municipal de Ordenación.

Este periódico se puso en contacto con uno de los responsables del edificio que declaró que "el Ayuntamiento sabe el uso que le estamos dando" y que se trata de algo "legal", aunque no quiso hablar sobre la licencia hotelera del inmueble.

Las que fueran habitaciones del hotel son ahora unos pequeños apartamentos que contienen un minúsculo salón con cocina y nevera, una habitación y un baño. En total, estas viviendas cuentan con menos de 30 metros cuadrados y se alquilan por unos 470 euros al mes, luz incluida, más 20 euros de agua. El edificio alberga además otros apartamentos de mayores dimensiones que rondan los 500 euros de alquiler. Aunque actualmente hay algunos disponibles no hay ningún cartel a la vista que lo publicite.

En general a este edificio, que conserva varios toldos y el nombre del hotel, le rodea un gran secretismo, incluso, los propios vecinos de la zona desconocen su uso actual y aseguran que está cerrado desde hace tiempo. Desde dentro del inmueble también se cuida que no haya movimiento de gente, de hecho, una de las normas expuestas en el hall es que los inquilinos abran la puerta de manera manual, aunque el inmueble cuenta con un portero automático, y que no permitan la entrada de personas que no sean de confianza.

Este hotel llegó a funcionar durante un tiempo, pero, según una usuaria ocasional, "era algo raro, ya que no funcionaban la cocina ni los ascensores". Algunos vecinos van más allá y sospechan que las habitaciones se alquilaban por horas.

En el casco histórico. El Hotel Santa Ana está situado en el casco antiguo de la capital grancanaria, al lado del teatro Guiniguada. En este barrio no hay ningún inmueble de estas características, siendo el más cercano de la zona el Hotel Madrid, ubicado en la plaza Cairasco.

Curiosamente varias cadenas hoteleras anunciaron hace unos meses su intención de reformar algún edificio en Vegueta para convertirlo en hotel, ya que se trata de un barrio cada vez más frecuentado por los turistas. De hecho, ya han tenido lugar una serie de contactos con diferentes propietarios de inmuebles.