Un casino más moderno y en el corazón de la ciudad. Con estas características se inaugura oficialmente esta noche el nuevo Casino de Las Palmas, que ya abandonó hace algunas semanas el hotel Santa Catalina para adentrarse en un lugar más céntrico y animado. El cambio ha supuesto una inversión de siete millones de euros.

Ubicado en el edificio Saba, con entrada por las calles Simón Bolívar y León y Castillo, las nuevas instalaciones se abren junto a algunas de las discotecas de moda de la capital grancanaria. El empresario canario Juan Padrón pretende con esta mudanza atraer a nuevos usuarios canarios, pero también a los turistas de cruceros que atracan por unos días en el muelle. "El Puerto ahora es la entrada de riqueza de esta ciudad", sostuvo ayer Padrón.

Con la inauguración de esta noche, a la que está prevista que acuda el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, se pone fin a una aspiración histórica de la entidad, que ha permanecido 23 años en el hotel Santa Catalina. Las nuevas instalaciones son más amplias que las anteriores, pasando de unos 800 metros cuadrados a cerca de 1.400, y cuenta con las máquinas "más modernas" del mercado.

Pérdidas en el hotel

"Todos podemos estar orgullosos de estas nuevas instalaciones que representan la ilusión de mi vida", se sinceró Padrón, que reconoció que el hotel Santa Catalina "no era el sitio" para el Casino de Las Palmas. De hecho, en los últimos tres años la entidad perdió dos millones de euros. "Era imposible continuar allí. De ser así, tendríamos que haber cerrado el Casino debido a las cuantiosas pérdidas", admitió el empresario.

Padrón explicó que el "mejor lugar" hubiera sido los edificios Elder y Miller, donde los promotores intentaron instalarse en el año 1987. Pero por esas fechas los inmuebles estaban en manos del Gobierno de España que los cedió posteriormente al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria con la condición de que se destinasen a un uso cultural. "Habría sido un proyecto maravilloso", recordó.

En 1987, con una autorización provisional del Gobierno de Canarias comenzó la actividad del casino de Las Palmas en el hotel Santa Catalina. La sociedad de juego mantuvo su actividad durante un lustro hasta que tuvo que cerrar al finalizar la licencia provisional. La misma entidad, participada al 50% por Juan Padrón y el grupo Cirsa (empresa española de juego y ocio), ganó el concurso público posterior por el que se mantuvo en el hotel, aunque siempre con la idea de poder trasladarse.

"Hemos hecho un verdadero esfuerzo en plena crisis económica para seguir ofertando a la ciudad un nuevo casino al más alto nivel, conforme a su condición de municipio turístico", dijo Padrón que considera este nuevo casino "potente" y "adecuado" en cuanto a sus dimensiones con respecto a la población canaria.