La Fiscalía Provincial de Las Palmas estudia trasladar a quince menores en riesgo de desamparo del centro de menores en el que se encuentran acogidos al detectar que "no se encuentran debidamente atendidos" y que el edificio en el que residen está "en mal estado".

Se trata de los jóvenes pertenecientes al Centro de Acogida Inmediata (CAI) Canteras, un hogar que gestiona el Cabildo de Gran Canaria, en el que se han detectado graves defectos de funcionamiento. Por ello, la Fiscalía valora el traslado de los niños a un hogar que "cumpla con la normativa vigente sobre la organización y el funcionamiento de los centros canarios".

Los menores del CAI Canteras viven en una zona del edificio del hogar Santa Rosalía de Telde, donde fueron enviados de forma temporal hace diez meses al ser desalojados de un piso alquilado en la zona de Altavista de Las Palmas de Gran Canaria. La situación, que sólo iba a durar tres meses, se alargó de tal manera que las quejas llegaron hasta la Fiscalía, que tomó cartas en el asunto y realizó una inspección.

En los informes realizados por los fiscales del área de Menores destacan cuatro infracciones: el "mal estado del edificio", que cuenta con "zonas cerradas por fallas estructurales"; la "escasez de personal" para la atención y cuidado de los quince menores residentes; la "carencia de licencia" y que no ha sido inspeccionado por la Dirección General del Menor del Gobierno de Canarias -que ejerce la tutela de los menores declarados en situación de desamparo- "desde marzo de 2011", un mes después de producirse el traslado a Telde.

De los primeros datos de la inspección, avanzados a principios de diciembre por LAPROVINCIA/DLP, pudo conocerse que los niños duermen en una misma estancia, simplemente separados por paneles en lugar de tener habitaciones separadas, lo que incidió de forma negativa en su rendimiento escolar. La situación ha hecho que la Fiscalía baraje la clausura del centro y el trasladado de los menores.

Los niños debían haber sido trasladados, en torno al mes de junio, al chalé que el Cabildo les estaba habilitando en la zona de Escaleritas. Sin embargo, diez meses después, las obras en esta residencia siguen y los menores continúan viviendo en condiciones inadecuadas, según se extrae de las deficiencias detectadas por la Fiscalía del Menor durante la inspección realizada el pasado mes de noviembre.