"No se puede hablar de euforia con tres días de ocupación alta"

- No se puede hacer una valoración sería por tres días de ocupación alta. Comparando los datos registrados y ya cerrados de 2010 con 2011, la ocupación bajó un 12% todo el año pasado. Hubo siete meses de 2011 que la ocupación estuvo sólo en el entorno del 20 al 25%. Y cuatro meses, entre ellos diciembre, de un 70%. Esa euforia es mentira, sólo fueron tres días y tres días no resuelven los 362 días restantes del año. Así y todo, la ocupación de noviembre y diciembre de 2011 fue inferior a la de 2010, que fue un 68% y la del año pasado fue un 66%. Pero lo que cuenta de verdad es el cómputo del año. No se puede hablar de euforia para nada, ha sido un año catastrófico y desolador porque no sabemos las causas aunque pueden ser las de siempre, sobre todo, que el Sur se ha comido todo y más porque también tienen muchas camas que llenar. Por otro lado, los precios no acompañan. Hay hoteles que tienen la mitad o menos de las camas que nosotros tenemos. Y que un hotel de cien habitaciones y que no tiene cinco estrellas, que tenemos muchísimas más exigencias, no se llena, imagínate uno de 300 habitaciones. También hay una competencia feroz entre los hoteles de cinco estrellas y los precios ya no se rigen tanto por la categoría.

- ¿Cree que se están adoptando las medidas adecuadas para que la ciudad sea de interés para otro turismo que no es de congresos y negocios?

- No conozco ninguna medida que se haya adoptado al respecto. Al contrario. Se venía avisando que venía el lobo del tema de perder los congresos en Las Palmas desde hace cinco años. Hasta que se perdieron. Desde que se abrió el Auditorio del Sur, el Congress Bureau está totalmente entregado a los hoteles del Sur y Las Palmas ciudad de congresos es inexistente. En cuanto al turismo de negocios también ha bajado. Antes viajaban tres y se quedaban tres días. Ahora viaja uno, por la mañana y se vuelve por la noche, y no pernocta. Y encima ya no se permite a muchos empresarios alojarse en un cinco estrellas. No se ha adoptado ninguna medida para atraer el turismo.

- ¿Estamos ante un renacimiento de la zona turística Puerto-Canteras o es meramente coyuntural?

- No es que estemos en un resurgimiento sino que existe una asociación que preside Nicolás Ortega que con su auténtico empeño e interés y ganas de sacar las cosas adelante, lleva luchando durante muchos años con varias administraciones para que se haya adecentado un poco el Puerto. A poquito que se le haga a la zona, mejora mucho. Pero aquí no es cuestión sólo de decoro. Se necesitan otras cosas como seguridad y más medidas serias.

- ¿Está el sector hotelero suficientemente apoyado por las administraciones públicas en estos tiempos de crisis?

- En absoluto. Todo lo contrario. Más bien, nos ponen la pata encima. Por ejemplo, nosotros en Las Palmas no podemos hacer plan renove porque nadie se ha interesado en conseguir el nombramiento de ciudad turística y poder optar a las ayudas del Gobierno. Pagamos el IBI y el incremento es absolutamente igual para todos. Imagínate los clavazos de IBI que pagamos los hoteles. El agua y la luz también suben y además son más caras para nosotros, no hay ninguna bonificación por industria. Por otro, el convenio colectivo de hotelería nos machaca muchísimo porque es un sector que tiene unos privilegios enormes. Entre que no hay ayudas, nos cobran más, los precios a los clientes bajan y no viene gente, habrá que cerrar y tomar medidas de reconversión del sector en algunos hoteles. De los gobernantes echo de menos, primero, conocimiento, y segundo, realidades, es decir, echo de menos todo. Se dicen muchas cosas pero sin fundamento como decir que hay una reactivación del turismo en Las Canteras.

- ¿Cree que la planta alojativa de la capital tiene la suficiente calidad o necesita un plan renove como el del Sur?

- Claro que necesitamos renovar pero como ya te dije antes nos es imposible. Ni tenemos las ayudas públicas ni las cifras nos acompañan, sino todo lo contrario. Qué más quisiéramos que poder renovar y así y todo se están haciendo esfuerzos por renovar que están costando muchos sacrificios que luego no vienen acompañados por los resultados.

- Con este panorama ¿ve a algunos hoteles abocados a convertirse en residencias particulares?

- No me extraña, al menos a entrar en una concursal. Es que en ese sentido te digo lo de los gobernantes. Hay que hacer un monográfico sobre el asunto y ver todas las condiciones que se dan. Más vale que vivan cinco a que mueran por inanición diez. La renovación de la superficie no te compensa y para que a otros les compensara y equilibrar el sistema a lo mejor habría que replantearse los cambios de calificaciones de algunos hoteles o cambiarlos a un uso residencial, o de apartamentos.