Los padres del colegio público Castilla insistieron ayer durante la protesta que celebraron a las puertas del centro que el Gutiérrez Rubalcava, a donde Educación quiere trasladar a los escolares el próximo año, no cumple con los requisitos mínimos que se exigen a los centros de enseñanza. El Ampa ya ha presentado alegaciones a la Consejería, pero ayer añadieron una más. La comunidad de vecinos de una de las dos torres en la que se ubica el colegio ha denunciado al Ministerio de Defensa -propietario del local- por el peligro que presenta la red eléctrica que circula por la azotea del centro y que impide acabar unas obras en el edificio.

La comunidad de propietarios, que está saneando y pintando la fachada, solicitó a Defensa que desmontara la red de abastecimiento de fontanería de la azotea para poder reparar las fisuras y grietas que tiene el edificio. Defensa no sólo no ha levantado las tuberías sino que ha obligado a parar la obra ya que, según el arquitecto que firma el proyecto, la red eléctrica supone además "un elevado riesgo ante cualquier intento de manipular las tuberías de fontanería para poder actuar en los pretiles".

Los vecinos ya han denunciado los hechos a Industria y tienen la obra parada desde el mes de febrero.

Los padres del Castilla, que defienden el trabajo de los docentes, recalcaron que los escolares hacen el recreo en la "vía pública" ya que no hay un patio. El Ampa propone que sea el Castilla el que acoja a los niños del Rubalcava y a los del Almirante Antequera.