Condenado a diez años el taxista de Valsequillo por abusos

Las agresiones se prolongaron durante más de ocho años

efe

La sección segunda de la Audiencia de Las Palmas ha condenado a diez años de cárcel a un taxista vecino del municipio grancanario de Valsequillo por abusar sexualmente de una menor durante siete años.

La Audiencia también condena al acusado, al que se imputa un delito continuado de abusos sexuales, a pagar 50.000 euros a la víctima, que en la actualidad tiene 22 años, por "los daños psicológicos y morales causados".

El fallo, difundido hoy por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, absuelve al acusado de otro delito de abusos sexuales continuados contra un joven con retraso mental moderado y de dos delitos continuados de exhibición de material pornográfico, de los que le acusaba el Ministerio Fiscal.

La Audiencia explica que "la exhibición de material pornográfico no constituye una conducta autónoma de los distintos abusos sexuales" y agrega que "la punición por separado por tales hechos hubiera precisado que el acusado exhibiera las películas pornográficas en otras ocasiones ajenas a la ejecución de actos sexuales", cuando "alcanzaría sustantividad propia el acto de difusión de pornografía".

La sentencia, contra la que cabe interponer recurso ante el Tribunal Supremo, considera probado que el acusado, Juan G.U., de 66 años, abusó "un número indeterminado de veces" y mostró películas pornográficas a la hija menor de una amiga entre 2002 y 2009, "aprovechando la precaria situación y la inteligencia límite de ambas".

El acusado cometió estos hechos en su vivienda, a la que invitaba a las dos mujeres, a quienes también "proporcionaba dinero y alimento", según se afirma en el fallo judicial.

Sin embargo, la Audiencia considera que "no ha quedado acreditado que" el condenado "mantuviera relaciones sexuales" con un joven con retraso mental moderado, como afirmaba el Ministerio Fiscal, debido a que la declaración del chico en el juicio oral "fue muy poco precisa".

La sentencia destaca que los abusos sexuales continuados que sufrió la menor han ocasionado a esta "un trastorno de adaptación mixto crónico de carácter grave", por lo que precisa de "urgente tratamiento psicológico, ya que en la actualidad no lo está recibiendo".

A ello se suma que la chica, que ha tenido varios intentos de suicidio y comportamientos autolesivos, "ha visto truncada su adolescencia", al haber sido sometida a "unas relaciones sexuales vejatorias que, sin duda, han supuesto un daño moral considerable".

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