El presidente de la Asociación de Reparaciones Navales de Las Palmas (ARN), Vicente Marrero, aseguró ayer que el sector "está pre-parado para reparar una plata- forma en dos meses". Marrero in-dicó que las empresas petrolífe-ras programan con antelación la reparación de sus naves y conocen la experiencia del Puerto de La Luz en esta actividad.
El portavoz del sector consideró que la llegada para después del verano de una torre petrolífera de alta tecnología para su reparación en el plazo máximo de 60 días será "una prueba para demostrar la capacidad del Puerto de Las Palmas con la industria de las plataformas".
El presidente del sector indicó que se habían organizado para atender cualquier petición que se les hiciera de reparación naval, incluidas las más exigentes como las que requiere la industria off shore. A este respecto, recordó que unas 60 del centenar de empresas cuentan con la triple certificación internacional en los sistemas de gestión de calidad, medioambiente y seguridad laboral. Estas acreditaciones convierten a la reparación naval en una de las actividades mejor preparadas no sólo en el ámbito del Puerto, sino en el conjunto de la economía canaria.
La Autoridad Portuaria de Las Palmas dio a conocer el jueves la llegada de dos plataformas petrolíferas. La Cols Promoter arribará el próximo 20 julio para una estancia de cuatro días en los que procederá a recoger repuestos, pertrechos y el cambio de tripulación. La segunda, una plataforma capaz de perforar a más de 3.000 metros de profundidad en condiciones meteorológicas adversas, lo hará para finales de septiembre para una puesta a punto general en dos meses.
Para esta intervención de urgencia se han requerido servicios de todos los astilleros y el centenar de talleres, en los que trabajan 1.450 empleados. Astican, Repnaval, Hidramar y el resto de las pequeñas empresas serán utilizadas para la realización de distintos trabajos en el tiempo convenido.
Esta espectacular operativa generará un volumen de negocio en torno a los 30 millones de euros y pondrá en juego la respuesta del recinto de la capital grancanaria para convertirse en la base logística de la creciente industria off shore que opera en los yacimientos petrolíferos del golfo de Guinea. En estos momentos, el Puerto de Las Palmas no tiene competidor en todo el África occidental ni en España en la prestación de esta actividad de alto valor añadido y generación de empleo.
